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"DE ADAM SMITH A LA INFLACIÓN EN POSTPANDEMIA (1776-2023)"
por E.V.Pita (2023)
Link al compendio de resúmenes:
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INCLUYE UN CÓMIC EN COLOR
RESUMEN DEL LIBRO "LA RIQUEZA DE LAS NACIONES" DE ADAM SMITH (1776)
Autor del cómic y resumen: E.V.Pita (2018)
CÓMIC EN COLOR Resumen del libro "La riqueza de las naciones", de Adam Smith (1776) Autor del resumen y cómic: E.V.Pita (2017) |
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Proyecto de webcomic: "La Riqueza de las Naciones", de Adam Smith (1776)
Versión en comic de E.V.Pita (2013, 2018)
Página 1
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Resumen: "La riqueza de las naciones", de Adam Smith (1776)
Sociología, estructura económica, estructura social, economía política
Autor de comentarios y resumen: E.V.Pita , licenciado en Derecho y Sociología.
Texto original y actualizado del resumen en:
http://evpitasociologia.blogspot.com/2011/11/la-riqueza-de-las-naciones-de-adam.html
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Ficha técnica
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Ficha técnica
Título: "La riqueza de las naciones"
Título original: "An Inquiry into the Nature and Causes of the Wealth of Nations"
Autor: Adam Smith
Primera publicación en inglés: 1776
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INTRODUCIÓN
Adam Smith procede de Escocia, en un mundo donde imperaban las teorías fisiócratas sobre la productividad de la tierra.
Los capítulos de mayor interés son el primero, sobre la división del trabajo, y el cuarto, donde menciona una única vez "la mano invisible" que rige el mercado de la oferta y la demanda de forma que se autoregulan.
Notas del lector:
Tras la lectura de la mitad del libro, puedo indicar varias cosas. Adam Smith cree que los salarios se equilibran en función de las épocas buenas y las malas, dado que existe un salario mínimo a partir del cual ya no compensa trabajar y que es el doble de la subsistencia, lo justo para alimentar a una familia. A partir de ahí, el salario oscila. Si un país afronta una época de crecimiento y hacen falta trabajadores, los salarios suben y se produce una época de prosperidad y de aumento de la natalidad. Es lo que ocurría en Norteamérica en 1776.
Muy en la línea de Malthus, si luego hay más trabajadores que trabajos, el precio del salario disminuye porque siempre habrá alguien dispuesto a trabajar por un poco menos. Por mucha presión sindical que haya, dice Adam Smith que al final imperará la ley natural del salario que busca un equilibrio entre la oferta y la demanda de trabajo y salarios. Hay algo que destacan otros autores posteriores (incluso del siglo XXI) y es que Adam Smith dice que los patronos pactan en secreto una reducción a la baja de los sueldos.
Luego, también estudia los tipos de interés como modo de saber si un país crece o no. Por ejemplo, el 3% rebela una envidiable economía mientras que un interés del 12 al 40% señala que hay problemas en ese país porque los acreedores ven riesgos.
En la introducción, Adam Smith da con la clave sobre lo que la riqueza supone para un país: se mide por el producto de su trabajo y el numero y proporción de empleados. [nota del lector: Actualmente, se toma como referencias el PIB y el PIB Per Capita]. Por ello, mientras una sociedad de salvajes malvive en una civilizada el más pobre tiene sus necesidades cubiertas y puede adquirir productos que le faciliten la vida.
Las primeras páginas son dedicadas a la división del trabajo, de cómo una persona puede tardar un día en hacer un único alfiler mientras que una cadena de empleados especializados consigue producir 4.180 al día. La especialización industrial es más fácil que la agrícola de ahí que la productividad del primer sector sea mayor que la del segundo.
Un concepto clave es el valor, que es definido en el capítulo 4 Del origen y uso del dinero, en el primet libro. El concepto de valor de uso y de cambio será revisado por Malthus, Ricardo y Marx a lo largo de un siglo de debates. Adam Smith define así el valor:
"el valor tiene dos significados distintos. A veces expresa la utilidad de algún objeto en particular y a veces el poder de compra de otros bienes que confieren la propiedad de dicho objeto. Se puede llamar a lo primero valor de uso y a lo segundo valor de cambio. Las cosas que tienen un gran valor de uso con frecuencia poseen poco o ningún valor de cambio. No hay nada mas útil que el agua pero con ella no se puede comprar nada, casi nada se obtendrá a cambio de agua. Pero un diamante, por el contrario, apenas tiene valor de uso pero a cambio de él se pueden conseguir generalmente una gran cantidad de bienes".
Adam Smith se propone demostrar 1) el precio real de todas las mercancías 2) las partes de ese precio real 3) por que algunos precios se elevan por encima o disminuyen por debajo de su tasa natural o porque el precio de mercado no coincide con el natural.
Al analizar los salarios, Smith estudia la peligrosidad de los mismos, la formación necesaria, la temporalidad, o lo ingratos que son los oficios. Por ejemplo, dice que un artesano debe cobrar más que un granjero y un minero, más que los demás. [Nota del lector: sobre el tema de la formación, es estudiado por Max Weber en La ética protestante]. También explica los altos ingresos de un boticario que no se deben a que este exprima altos beneficios a sus baratos productos sino que ahí va incluido su salario por la responsabilidad. En el caso de abogados o médicos, solo uno de 20 logra culminar la carrera, por lo que cobra lo de 20.
Posteriormente, estudia los ingresos obtenidos por los tenderos de Londres y de otras localidades, para explicar por qué en Londres los productos son más baratos si el transporte al medio rural cuesta más o menos lo mismo.
Sobre los gremios
En otro de los apartados del libro, examina los grandes obstáculos a la libertad de comercio que suponen las reglas y ordenanzas de los gremios, que limitan el número de aprendices de cada artesano o establecen que las universidades de herreros o canteros, artesanos en general, durarán siete años de formación. Lo único que se consigue así, dice Smith, es que los aprendices sean perezosos ya que trabajarán siete años gratis para su maestro pudiendo trabajar y aprender desde el principio, lo que sería más productivo para la economía en general pero no para los gremios, que verían reducir sus beneficios.
Tal y como está montado el sistema de gremios, un fabricante de coches (carruajes) no puede fabricar las ruedas sino comprarlas a un artesano cualificado del gremio, artesano que no tiene prohibido fabricar coches.
Smith dice que un campesino necesita mucha más habilidad y sesera para producir una cosecha que un artesano u obrero, que se aplica intensivamente a una o dos destrezas. Entonces, ¿por qué el salario de un campesino es menor que un jornalero de ciudad? La razón, dice, es que el sistema de reglamentos de los gremios encarece los precios en la ciudad porque la idea es sacarle dinero al campesino que va a comprar a la ciudad.
Para Smith todas estas regulaciones que quieren asegurar la calidad del producto son redundantes porque es el cliente quien dice si un artículo es de calidad y no le interesa saber si el aprendiz ha estudiado 7 años o 5. Y de hecho, tales regulaciones solo son aplicadas en la ciudad, dado que en el campo no se cumplen porque la economía del día a día obliga a los aprendices a estar operativos en el más corto plazo de tiempo para ser productivos.`
[Nota del lector: inevitablemente, os gremios traen el recuerdo de las universidades como fábrica de parados y la desmotivación de los alumnos, así como las famosas regulaciones de denominación de origen y otras normas sobre el comercio]
Sobre economía política y "la mano invisible"
El famoso párrafo dice: " todo individuo necesariamente trabaja para hacer que el ingreso anual de la sociedad sea el máximo posible. Es verdad que por regla general él ni intenta promover el interés general ni sabe en que medida lo está promoviendo. Al preferir dedicarse a la actividad nacional más que a la extranjera él solo persigue su propia seguridad y al orientar esa actividad de manera de producir un valor máximo él solo busca su propio beneficio, pero en este caso como en otros una mano invisible lo conduce a promover un objetivo que no entraba en sus propósitos. "
Sobre la libertad de comercio
Smith defiende la libertad de comercio porque es tontería fabricar algo que cuesta menos comprarlo en el extranjero. No obstante, para no arruinar al comerciante del propio país propone que la entrada de productos extranjeros sea paulatina. [nota del lector: años después David Ricardo hablará de la ventaja competitiva de las naciones, concepto que ha sido rescatado por los defensores de la globalizacion como Thomas L. Friedman en La Tierra es plana]. Smith excluye del libre comercio al sector de la Defensa, al considerar que la defensa nacional es más importante que los intereses comerciales.
Sobre la emisión bancaria
Smith critica al banco de Escocia porque hacía favores a sus dueños, que sacaban dinero de la caja para volverlo a ingresar y obtener intereses, o porque concedía grandes créditos para proyectos de cultivos que tardarían mucho en generar rentas.
Sobre la inflación y los precios
Gran parte de la obra de Smith está dedicada a analizar la evolución de los precios y del coste de la plata desde tiempos de Julio César, la Edad Media y la conquista de América, y compararla con el precio del trigo. Dice que en ciudades ricas como Génova es caro porque lo importa.
Sobre China
Admite que en el siglo XVIII, China es el país más rico del mundo pero que está estancado, por lo que los salarios reales son más bajos que en Inglaterra y el resto de Europa, economías emergentes y en crecimiento.
Utilitarismo
¿Cuál es el valor real de una cosa? Smith dice que el precio real, la cantidad de trabajo que pueden comprar o comandar, sube en epocas de pobreza y depresión y se hunde en tiempos de riqueza y prosperidad, que siempre son tiempos de copiosa abundancia, puesto que en caso contrario no lo serían de riqueza y prosperidad. El cereal es algo necesario mientras que la plata es supérflua. Por eso, los países míseros (los pueblos salvajes, los más pobres, dice) no le dan valor a los metales preciosos.
Establece que el precio real es la cantidad de trabajo que exige hacer algo para comprarlo. [Nota del lector: el economista Karl Marx hizo una matización a esta formulación, ya que dijo que hay que descontar una parte del valor del trabajo total pues corresponde al beneficio o plusvalía que obtiene el empleador].
Evolución del precio de los metales preciosos
[Nota del lector: este apartado es importante, porque la evolución del precio de la plata tiene relación directa con la economía de Castilla y la conquista de América]
Por consiguiente, cualquiera que haya sido la expansión en la cantidad de metales preciosos que derivó, en el periodo entre mediados del siglo XIV y XVI, del incremento de riqueza y el progreso, no pudo haber influido en la caída de su valor, ni en Gran Bretaña ni en parte alguna de Europa.
En una segunda fase, de 1570 a 1640, el valor real de la plata se hundió y el precio nominal del grano subió. El descubrimiento de los ricos yacimientos de América parece haber sido la causa.
Tercera época: de 1630 a 1640, se hundió completamente el precio de la plata, que no se recuperó hasta 1700 mientras el trigo creció algo, en parte fomentado por leyes y subvenciones.
Ya en 1776, Smith rechaza la conjetura de que sigue cayendo el valor de la plata pese a la creencia general de que el aumento de la riqueza en Europa y la idea popular de que cuando la cantidad de metales preciosos se eleva con el incremento de riqueza su valor disminuye.
Smith cree que no: que el oro y la plata fluyen hacia un país rico por la misma razón que acuden al mismo toda clase de lujos y rarezas; no porque allí son más baratos que en países más pobres sino porque son más caros, o porque se obtienen más de ellos.
Añade que con la excepción del cereal y otros vegetales cuyo cultivo deriva solo del trabajo humano, todas las clase de materias primas se vuelven más caras a medida que la sociedad avanza hacia la riqueza y el progreso. Esto es síntoma de que las mercancías se han vuelto más caras o que compran más trabajo que antes. Con el progreso y los adelantos, lo que aumenta no es sólo su precio nominal sino también su precio real.
Evolución del precio real en las materias primas
Smith estudia la evolución desde tiempos de Roma del precio de las materias primas como el trigo, la carne, la lana, cuyos precios fluctúan según la competencia que haya para obtenerlas.
Por ejemplo, dice que el precio del ganado sube tanto que resulta tan rentable cultivar tierra para obtener alimento para el ganado como para el hombre, ya no puede subir más. Si lo hiciera, entonces se destinarían los campos cerealeros para pastos. Muchos países y regiones aún no han alcanzado ese precio limite, dice.
Los tipos de interés
Estudia las politicas monetarias y las inversiones rentables de capital. Acusa de falaces a quienes como Locke, Law, Montesquieu conjeturan que el incremento en la cantidad de oro y plata traído por España fue la causa real de la disminución del tipo de interés en toda Europa. Es una falacia, dice, pensar que al reducirse el valor de esos metales, también debería haberlo hecho el valor del empleo de cualquier porción de los mismos y por ello el precio que debería pagarse por ese empleo. Smith contraargumenta que antes del descubrimiento de América, el tipo de interés era del 10% y ahora se ha reducido al 6,5,4 y 3%. Dice que es imposible que la reducción en el valor de la plata tenga la más minima tendencia a reducir el tipo de interés.
La última parte del libro la dedica a la historia económica de Roma hasta el siglo XVIII
Sobre los impuestos
Dedica el último apartado a ver cómo se recaudan los impuestos y cual es su valor límite. Es especialmente crítico con los impuestos recaudados en las colonias ya que considera que no compensan el gasto que genera su defensa. "El imperio británico es una fantasía que se ha vendido al pueblo y que solo ha existido en nuestra imaginación", dice.
El último párrafo del libro.
El libro fue publicado durante la Guerra de Independencia de Estados Unidos. Smith dedica las últimas líneas de su libro a lo siguiente: "Los efectos del monopolio del comerco colonial, como se ha demostrado, son para el grueso de la población una pura pérdida en vez de un beneficio. [...] Si el proyecto no puede llevarse a cabo, entonces debe ser abandonado. Si no se puede lograr que cualquier provincia del Imperio británico contribuya al sostenimiento de todo el imperio, está claro que ha llegado el momento de que Gran Bretaña se libere del gasto de defender a esas provincias en tiempos de guerra o militares en tiempos de paz, y que en el futuro procure ajustar sus ideas y sus planes a la mediocridad real de sus circunstancias".
[Nota del lector: Recomendaciones: el libro es un auténtico manual de Economía que ayuda a razonar sobre la evolución de los precios, los tipos de interés o los impuestos. Posteriores autores lo han criticado pero la forma de razonar del libro es válida para entender el funcionamiento de una economía. A día de hoy, es un autor que casi todos los economistas mencionan, generalmente para rebatir algún matiz de su discurso. Su famosa frase "la mano invisible del mercado" es un dogma a día de hoy para los neoliberales]
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CRÍTICAS Y COMENTARIOS A "LA RIQUEZA DE LAS NACIONES"
CRÍTICAS DE DAVID RICARDO
David Ricardo en su libro "Principios de Economía Política y Tributación" (publicado en 1817) examina la teoría del valor de Adam Smith y le hace importantes correcciones.
Sobre el alza de los salarios seguida del alza de precios:
"Adam Smith y otros dijeron que un alza en los salarios sería constantemente seguida por un alza en los precios de todas las mercancías. Tal opinión carece de fundamento pues solamente se elevarían las mercancías que tienen invertido menos capital fijo que aquella con la cual se estima el precio, y las que tienen invertido más bajarían efectivamente de precio cuando los salarios subieron. Si los salarios bajan, solo bajarían las mercancías que tienen empleado capital fijo en proporción menor que aquella con la cual se estima el precio: todas las que tienen más subirán efectivamente de precio".
Crítica a Adam Smith sobre el valor de cambio de las mercancías
"Adam Smith no está en lo cierto al suponer que la ley fundamental que regula el valor de cambio de las mercancías, es decir, la cantidad relativa de trabajo con que son producidas, puede ser alterada por la apropiación de la tierra y el pago de la renta. En la composición de la mayor parte de las mercancías entra materia prima, pero el valor de esta y del cereal, se regula por la productividad de la última porción de capital empleado en la tierra y que no paga renta. La renta, por tanto, no es un componente del precio de las mercancías",
CRÍTICAS DE KATRINE MARÇAL (2012)
Críticas recogidas en el libro "¿Quién le hacía la cena a Adam Smith?", de Katrine Marçal (2012)
Resumen original y actualizado en:
https://evpitasociologia.blogspot.com/2019/05/quien-le-hacia-la-cena-adam-smith-de.html
Katrine Marçal es la jefa de opinión de Aftonbladet, el principal periódico de Suecia, donde escribe sobre política, economía y feminismo. Vive en Londres.
La autora considera que el "homo economicus" (el individuo racional que actúa egoístamente y en su propio interés de forma que la suma de egoísmos beneficia a toda la sociedad) es una falacia de la Ilustración y que la realidad es que hay un gran remanente de solidaridad y un trabajo no remunerado efectuado por las mujeres en el hogar y el cuidado de los niños. De ahí, el título del libro: "¿Quién le hacía la cena a Adam Smith?". Era su madre, la cual no cobraba por servir la comida a su hijo, el cual disponía de tiempo libre para meditar y escribir sobre sus elucubraciones económicas. De fondo, trasluce una crítica al libre mercado, demasiado simplista, y que ignora el profundo papel desempeñado por la acción pública. La autora hunde la imagen del "Homo economicus" pues dice que, o bien es una falacia que no existe, o a lo sumo tendría la mentalidad egoísta de un niño de 4 años. De hecho, dice que el protagonista de su historia "no existe" ni se parece a nadie de la realidad. Al igual que otros autores, cree que esta visión seductora nos la han inculcado hasta formar parte de nosotros hasta permitir que predomine sobre otros valores en nuestra vida diaria.
La autora arranca el libro recordando que femenismo y economía van de la mano: la escritora Virginia Wolf quería una habitación propia y eso cuesta dinero. Indica que el objetivo del movimiento feminista fue hacerse con dinero y otros privilegios tradicionales acaparados por los hombres a cambio de cosas como "el derecho a llorar en público".
Marçal recuerda el fatídico 15 de septiembre del 2008, cuando Lehman Brothers se declaró en quiebra y arrastró consigo a millones de empleados por todo el mundo. La autora recuerda que nos habían dicho que si estábamos callados y no dábamos la lata, el sistema funcionaría por sí solo, bastaba con que dejásemos la economía en manos de expertos, pero era mentira. Todo iba a cambiar pero, en el 2014, el sector financiero se ha recuperado y los beneficios, salarios, dividendos y primas volvieron a su nivel previo a la crisis.
La autora sostiene que los fondos islandeses dirigidos por mujeres lograron sobrevivir porque los hombres superhormonados asumieron riesgos excesivos. Dice que un mundo donde las mujeres dominasen Wall Street sería radicalmente diferente del actual (habría una Lehman Sisters que seguiría todavía en funcionamiento sin sobreesponerse al mercado sobredimensionado mercado inmobiliario estadounidense).
Marçal insiste en que la mujer ha trabajado siempre pero ahora ha cambiado el trabajo de casa por la oficina (la mitad de la población ha trasladado el grueso de su actividad de la esfera doméstica al mercado). Lo califica como un cambio social y económico enorme, "hemos saltado de un sistema económico a otro sin darnos realmente cuenta del salto". De cuatro hijos se pasó a una ejecutiva con su bebé en el maletín o a una joven de clase obrera adolescente con un bebé en un piso de protección oficial. Pero incluso en Suecia las mujeres ganan menos que los hombres y hay pocas en puestos de mando. Ironiza con que el presidente de la FED suele ser nombrado "hombre del año" por bajar los tipos de interés y salvar la civilización occidental.
La autora se pregunta ¿cómo llegamos a tener nuestra comida en la mesa? Se pregunta por qué recorrimos al egoísmo en vez del amor (un bien escaso). Adam Smith indicó que "No de la benevolencia del carnicero, el cervecero y del panadero, sino de sus miras al interés propio, es de quién esperamos y debemos esperar nuestro alimento". Mientras el interés propio es inagotable, el amor es un bien escaso (mejor guardarlo para usos privados). "Adam Smith nos contó el cuento de por qué el libre mercado era la mejor manera de crear una economía eficaz, introducía las ideas radicales de libertad y autonomía". Eliminando aranceles y regulaciones, la economía marchará sobre ruedas y el pan nos esperará todos los días en la estantería del supermercado (y no en las estanterías vacías de la Unión Soviética). La idea es que la gente hace lo que hace para obtener algún beneficio, no es muy halagador pero es la realidad, es el principio rector que cohesiona la realidad "como una mano invisible". Esa es la paradoja, dice la autora.
Respecto a la "mano invisible" (todo lo mueve, lo controla todo, lo decide todo sin verla ni percibirla) es algo que surge de las acciones y decisiones individuales (una mano que hace girar el sistema desde el interior). Está en sintonía como que lo dijo el físico Newton y sus leyes del Sistema Solar (un dispositivo automático que giraba solo). En realidad, una vez descifradas estas leyes, la sociedad sería un reloj que funcionase a la perfección. De ahí surgió una economía lógica, racional y predecible.
La autora indica que "muchos queremos vivir en una economía de mercado pero no en una sociedad de mercado aunque lo uno va con lo otro".
"Cuando Adam Smith se sentaba a cenar, pensaba que si tenía la comida en la mesa no era porque les cayera bien el carnicero y al panadero, sino porque estos perseguían sus propios intereses por medio del comecio. Era, por tanto, el interés propio el que le servía la cena. Sin embargo, ¿era así realmente? ¿Quién le preparaba, a la hora de la verdad, ese filete a Adam Smith? Él nunca se casó. El padre de la ciencia económica vivió la mayor parte de su vida con su madre, que se encargaba de la casa mientras un primo gestionaba las finanzas". La autora añade que la madre se mudó a vivir con su hijo a Edimburgo y que lo cuidó siempre. "Ella es la parte que Adam Smith pasó por alto", dice Marçal. El carnicero, el panadero y el cervecero tenían esposas, madres o hermanas que dedicaban horas a cuidar a los niños, limpiar el hogar, preparar la comida, lavar la ropa, servir de paño de lágrimas y discutir con los vecinos. "El mercado se basa siempre en otro tipo de economía que raramente tenemos en cuenta", dice la autora. Se queja de que nadie reconoce en el PIB el trabajo de la niña de 11 años que recorre todos los días 15 kilómetros para recoger agua o leña para su familia. El trabajo femenino en el hogar no se considera "trabajo productivo" en los modelos económicos estándar. "Fuera del alcance de la mano invisible se encuentra el sexo invisible", dice. Así como hay un "segundo sexo" hay una "segunda economía" que ayuda a hacer "el trabajo que cuenta".
La autora recalca: "Adam Smith logró responder la pregunta fundamental de la Economía solo a medias. Si tenía asegurada la comida no era solo porque los comerciantes sirvieran a sus intereses propios sino que también la tenía asegurada porque su madre se encargaba de ponérsela en la mesa todos los días". La economía se cimienta no solo en una "mano invisible" sino también en un "corazón invisible" (una visión demasiado idealizada de los deberes de la mujer, según dice Marçal).
LOS FALLOS DE MERCADO (STIGLITZ, 2012)
Stiglitz y sus comentarios sobre "La riqueza de las naciones", de Adam Smith, y los fallos de mercado.
[Nota del lector: Tiene el interés de que es la interpretación más contemporánea del libro, escrito hace casi dos siglos y medio.]
Stiglitz recuerda que Adam Smith, el padre de la teoría económica moderna, sostiene que la búsqueda privada del interés propio daría lugar, como a través de una mano invisible, al bienestar de todos.
[Nota del lector: ojo, solo menciona "mano invisible" una vez en todo el libro]. A ello replica Stiglitz que, hoy día, con esta crisis, nadie sería capaz de argumentar que la búsqueda de su propio interés por parte de los banqueros haya conducido al bienestar de todos. Ni siquiera es un juego de suma cero (lo que gana uno, lo pierde el otro).
Stiglitz dice que, de la fórmula postulada por Adam Smith, cuando los mercados funcionan bien, es porque la rentabilidad privada y los beneficios sociales están bien alineados porque las recompensas privadas y las contribuciones sociales se igualan tal y como suponía la teoría de la productividad marginal (las personas con una productividad más alta reciben un salario más alto). La divergencia entre rentabilidad privada y social estribaría, según Adam Smith, en que por sí mismos los mercados no producen resultados eficientes ni deseables (por ejemplo, decidiendo los fabricantes aumentar los precios a la vez) y ahí el Gobierno tiene el papel de corregir esos fallos de mercado mediante impuestos y normativas que vuelvan a alinear los incentivos privados y las rentabilidades sociales.
Si no están alineados esos incentivos privados y sociales, dice Stiglitz, hay:
1) competencia imperfecta
2) existen externalidades [Nota del lector: Ver "El economista camuflado", lo explica bien, se refiere a la contaminación que causas las empresas]
3) imperfecciones o asimetrías de información [NdL: Stiglitz recibió el Nobel por estudiar esas asimetrías]
4) cuando no existen los mercados de riesgo o de seguros.
Segun Stiglitz, el Gobierno debe corregir estos fallos de mercado mediante regulación pues lo contrario lleva a que la rentabilidad privada sea mayor que la social y eso genere desigualdad como ocurre desde que subió Reagan al poder en 1980 hasta la actualidad.
EL MITO DEL TRUEQUE (GRAEBER)
Libro "En deuda" / capitulo 2 - El mito del trueque
Graeber, como antropólogo, cuestiona el mito del trueque como antecesor de la economía. Dice que surge de un capítulo de la riqueza de las naciones de Adam Smith donde dice que el dinero es anterior al crédito y los préstamos y surge como medio de pago para facilitar los intercambios que eran difíciles con el primigenio sistema de trueque ya que siempre tendrías que encontrar a alguien que quiera lo que tu ofreces por lo que buscas. Sin embargo, Graeber sostiene que Adam Smith se ha inventado lo del trueque porque las sociedades del neolítico y de cazadores-recolectores ya tienen otros sistemas más funcionales que consisten en el "me llevo esto y ya te lo pagaré" o "cógelo del fondo común" o "tienes un collar o unos zapatos muy bonitos, me los llevo". El trueque no se usa porque, efectivamente, no vale para los intercambios salvo excepciones (cambio de sal por pieles, tabaco por vestidos, donde la sal y el tabaco funcionen como moneda).
A donde quiere llegar Graeber es a que estos intercambios primigenios funcionan mediante el préstamo y el crédito, en la confianza de que lo que hoy se lleva uno lo apunta el otro para cobrarselo algún día. Y, según Graeber, nadie prestó atención a que la deuda y el préstamo son mas antiguas que el dinero ( un medio de pago aceptado por todos).
COMENTARIOS DE NOAM CHOMSKY SOBRE ADAM SMITH
El autor Noam Chomsky en "Estados Fallidos" (2006) dice que Adam Smith fue un hombre honesto que comprendió las supuestas injusticias de la política económica del gobierno británico en la India y su propio país. Dijo que quienes dirigían la política eran los financieros y comerciantes y que las politícas de Gran Bretaña lógicamente perseguían el interés de estos a su conveniencia. Chomsky dice que este párrafo en la obra de Smith lo catalogó como un "teórico de la conspiración".
CRÍTICA DE LORETTA NAPOLEONI
Loretta señala en su libro "Economía Canalla" (2008:235) que Adam Smith afirma que una mano invisible regula el mercado. Esta mano oculta dirige las fuerzas del mercado de acuerdo a la necesidad de los individuos de maximizar sus ganancias o beneficios. Este comportamiento, añade, resulta racional y en perfecta consonancia con la naturaleza humana. Aunque cada individuo busca exclusivamente su interés personal, la suma de estos comportamientos egoístas acaba enriqueciendo y beneficiando a la nación porque los escasos recursos del capital se dirigen siempre a inversiones que proporcionan el mayor beneficio con el menor riesgo. Al buscar el máximo beneficio y mínimizar las pérdidas, los individuos contribuyen a la riqueza de su nación, Esa sería la magia del mercado.
Napoleoni dice que "para los economistas del mercado, la mano invisible de Smith presenta un icono casi religioso que nadie en su sano juicio se atrevería a desafiar". Esto funciona en la economía global y las empresas americanas trasladan sus fábricas a China para abaratar costes. Sin embargo, en una economía internacional el propio interés racional puede enriquecer o empobrecer a amplios sectores de la población mundial muy alejados de las fronteras nacionales (lo que conlleva el cierre de fábricas en lugares alejados como México tras las fuertes inversiones en China). Según Napoleoni: "si la mano invisible de Smith guía la revolución de la globalización, podríamos sostener que a largo plazo el capitalismo occidental controlará la economía mundial y que las poblaciones y naciones se enriquecerán gracias a una mejor y más eficiente distribución de los recursos. Sin embargo, una atenta mirada al crecimiento de las finanzas islámicas parece contradecir ese argumento. Al facilitar el tribalismo transnacional, la globalización creó las condiciones ideales para la eclosión de las fuerzas islámicas, como ilustra la dinamización de la economía malaya. Esto representa un nuevo sistema económico regulado por principios ajenos a la economía de mercado y potencia rival del capitalismo occidental. Adam Smith estaría de acuerdo con que la notable inmesión de Malasia en las finanzas islámicas no ha sido guiada por su mano invisible del mercado sino más bien por factores religiosos como la solidaridad tribal musulmana".
OTROS RESÚMENES DE "LA RIQUEZA DE LAS NACIONES" EN INTERNET
- http://apuntes.rincondelvago.com/la-riqueza-de-las-naciones_adam-smith.html
- http://www.altillo.com/examenes/uba/economicas/ciclogeneral/economia/econ2009resadamsmith.asp
- http://www.cee.usb.ve/La%20riqueza%20de%20las%20naciones.htm
- http://www.eumed.net/tesis/jcrc/RESUMENFINAL.pdf
- http://www.buenastareas.com/ensayos/Adam-Smith-La-Riqueza-De-Las/378409.html
- http://www2.uah.es/econ/hpeweb/HPE983.html
- http://www.elortiba.org/smith.html
- http://es.wikipedia.org/wiki/La_riqueza_de_las_naciones
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