martes, 22 de agosto de 2023

"Crimen climático", de David Lizoain (2023)

Resumen del libro "Crimen climático", de David Lizoain (2023)

Resumen original y actualizado en:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/08/crimen-climatico-de-david-lizoain-2023.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación y licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, ecología, medioambiente, crisis climática, cambio climático, calentamiento global, sostenibilidad

.........................................................................................

Ficha técnica

Título: "Crimen climático"

Subtítulo: Cómo el calentamiento global está produciendo un genocidio

Autor: David Lizoain

Edición en español: Debate, PRHGE, Barcelona

Número de páginas: 178

.........................................................................................

Biografía del autor David Lizoain (hasta 2023)

David Lizoain (Toronto, 1982) es economista. Cursó sus estudios en la Universidad de Harvard y la London School of Economics, y ha ejercido como asesor del gabinete de Presidencia en la Moncloa y del departamento de Presidente de la Generalitat de Catalunya. En 2017 publicó el ensayo El fin del primer mundo

..........................................................................................

Texto de la contraportada

"Estamos viviendo un momento decisivo para el planeta, que se encuentra al borde del colapso por culpa de las acciones humanas. En este fascinante ensayo de naturaleza optimista - aunque en ocasiones puede parecer lo contrario -, David Lizoain señala a los principales responsables de la actual emergencia climática y expone los puntos clave para un Green New Deal, ese indispensable proyecto de reestructuración económica masiva con el que lograríamos evitar el colapso y que culminaría en un nuevo régimen social y energético.

Se espera que a lo largo de esta década vayan sucediéndose incontables desastres (pandemias, olas de calor, la pérdida de hábitats hasta ahora intactos, un descenso significativo de la biodiversidad...), algunos de los cuales ya han comenzado a desplegar sus terribles efectos. Estos no hacen sino confirmar la más que urgente necesidad de una transformación sin precedentes. ¿Podemos afirmar que se está produciendo un genocidio climático? Esta es la pregunta que plantea Lizoain al inicio del libro. Su respuesta, clara y contundente, es que nadie más que el ser humano, con su obsesión por el crecimiento perpetuo, ha abonado el terreno para la catástrofe. El nuestro es ya un mundo de eco-apartheid, y el genocidio climático tiene lugar gracias a la complicidad generalizada de los poderosos. Es hora de terminar con la impunidad, movilizarse y lograr una ruptura radical con el "status quo"."

......................................................................................................................

ÍNDICE

Introducción. Vivir en la emergencia climática. 

1. De la emergencia climática al genocidio climático

2. ¿Podemos hablar de un genocidio climático?

3. El implacable impulso del mundo por acumular

4. El eco-apartheid y matar a distancia

5. La responsabilidad por el genocidio climático

6. Del castigo a la acción colectiva

7. El Green New Deal y el socialismo solar

Epílogo: vivir en tiempos de posibilidad

......................................................................................................................

RESUMEN

El autor señala que el cambio climático (con más olas de calor, inundaciones, peores huracanes y monzones, y pérdida de hielo y glaciares) implicará más personas sin acceso a agua potable ni agua potable, más migraciones forzadas, más conflictos políticos y muertes masivas. Dice que esto se ignora o se quiere ignorar (se invisibiliza) porque es "socialmente desagradable". Según Screcko Horvat estamos viviendo en un escenario "postapocalíptico". Citando a Sven Lindqvist, "para acabar con el crimen, primero hay que reconocer la realidad".

El autor señala que el cambio climático es "inequívocamente" antropogénico porque los últimos 8 años (2015-2023) han sido los más cálidos registrados hasta la fecha. Recalca que el cambio climático es un proceso lento que ahora se desarrolla rápido (el aumento de temperatura de los últimos 50 años ha sido el más rápido en 2000 años). Se habla de que hemos entrado en el "piroceno" (una edad de hielo, pero de fuego). La nieve del Ártico se está convirtiendo en lluvia antes de lo previsto, dice. Guterres advirtió que "estamos librando una guerra suicida contra la naturaleza". Se habla ya de que el aumento de temperaturas o la acidificación de los océanos generará una sexta extinción masiva porque el 25 % de los animales está en peligro y un tercio de los árboles por la tala y la agricultura. Pese a ello, las instituciones financieras han hecho tratos de 175.000 millones de dólares con los deforestadores desde el Acuerdo Climático de París en 2015 (según Global Witness). Hay una relación casi lineal entre las emisiones humanas de CO2 y los grados de calentamiento provocados. Y las emisiones continuarán a fuerte ritmo porque sigue habiendo inversiones industriales en energías fósiles.

Afirma que existe un "crimen climático" porque las élites del mundo rico no están haciendo nada por evitar las emisiones de carbono que afectarán a los más pobres a pesar de que, desde los años 60, los científicos están avisando de ello. Dice que los políticos y ejecutivos de las empresas emisoras no pueden poner como excusa que no sabían nada del calentamiento global porque desde los años 60 y 70 se han sucedido avisos, congresos y firmas de tratados para reducir el impacto del CO2. Por ello, creen que las élites actuaban con conocimiento de causa y no hicieron nada para frenar ni tampoco les importó el goteo de muertes de millones de personas que viven en los países más pobres. Por esa razón, cree que está hablando de un "crimen" o de un "genocidio" (porque las víctimas del cambio climático no serán los millonarios con superyates ni la clase media con aire acondicionado, sino aquellos habitantes pobres de países donde no pueden contrarrestar las altas temperaturas con aire acondicionado ni pueden viajar como turistas a países más templados ni disponen de unas viviendas capaces de aguantar los huracanes ni tienen alimentos si se produce una sequía prolongada en sus tierras). Dice que el "crimen climático" es sentarse de brazos cruzados, desde la distancia, a ver cómo mueren millones de personas en grandes hambrunas por las consecuencias de un cambio climático que los países pobres no han generado sino los ricos. Cree que hay motivos suficientes para sentar en el banquillo a los ejecutivos y directivos que planeen seguir abriendo más pozos petrolíferos o invirtiendo en industrias de combustibles fósiles a pesar de que conocen el grave daño que están ocasionando al planeta y a las generaciones futuras sin que hayan cesado en su actitud sino todo lo contrario.

David Lizoain explica que, siguiendo a otros autores, hay que cuatro tipos de responsabilidad respecto al "crimen climático": la directa (el propio emisor que ignora deliberadamente los efectos de los combustibles fósiles), la imprudente, la negligente y la de los votantes que votan a partidos defensores del crecimiento mediante combustibles fósiles, que permiten las emisiones de gases a la atmósfera y la contaminación. En este último caso, serían también responsables los ciudadanos de cada país que permiten esas políticas de crecimiento con calentamiento global y de acumulación. 

Describe el "crimen climático" como un "crimen administrativo" o "crimen burocrático" basado en políticas o no políticas que impiden a los residentes de zonas arrasadas por el calor refugiarse en el 

Respecto a las víctimas, Lizoain recalca que desde el primer mundo se lanza un mensaje de que los grandes huracanes e inundaciones que provocará el cambio climático afectarán a la gente pobre de países subdesarrollados, con lo que ya se les está señalando como los "otros" y las élites están dando un mensaje tranquilizador para la clase media de los países ricos de que esas personas pobres serían las "sacrificadas" por culpa del cambio climático. El hecho de señalarlos como los "otros" demoniza a los más pobres como posibles refugiados ambientales, inmigrantes que huyen de las sequías y la pobreza en sus países desertizados o inundados por la subida del mar. 

A ello se suma lo que denomina "eco-apartheid", una forma de no permitir que los pobres se refugien en el mundo templado y rico de Europa o Estados Unidos. Para ello Europa está instalando barreras en el Mediterráneo (y prohíbe los salvamentos) y Estados Unidos protege su frontera del sur frente a los inmigrantes y los refugiados climáticos.

En cuanto a las leyes y la justicia internacional, el autor duda de que la Corte Penal Internacional (CPI) tenga competencias para sentar en el banquillo por crímenes contra la humanidad a los directivos y ejecutivos de grandes petroleras y grupos energéticos o la industria basada en combustibles fósiles. Apuesta por esa solución pero también ve viable la de los "tribunales civiles" (como los creados por Russell y Sartre durante la Guerra de Vietnam en los años 1968) para condenar todos los abusos militares contra la población civil, no solo los del enemigo derrotado. Se haría algo parecido con los abusos del clima, para que todos los ejecutivos de la energía fósil supiesen a que atenerse en caso de seguir contaminando el planeta.

Finalmente, cree que la política de New Green Deal sería una buena idea para descarbonizar las economías. Recuerda que no hay que culparse a sí mismo por comer carne o viajar en avión sino que esto forma parte de una estructura mucho mayor basada en una economía de energía fósil que habrá que sustituir.




No hay comentarios:

Publicar un comentario