Mostrando entradas con la etiqueta ecología. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ecología. Mostrar todas las entradas

martes, 22 de agosto de 2023

"Crimen climático", de David Lizoain (2023)

Resumen del libro "Crimen climático", de David Lizoain (2023)

Resumen original y actualizado en:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/08/crimen-climatico-de-david-lizoain-2023.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación y licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, ecología, medioambiente, crisis climática, cambio climático, calentamiento global, sostenibilidad

.........................................................................................

Ficha técnica

Título: "Crimen climático"

Subtítulo: Cómo el calentamiento global está produciendo un genocidio

Autor: David Lizoain

Edición en español: Debate, PRHGE, Barcelona

Número de páginas: 178

.........................................................................................

Biografía del autor David Lizoain (hasta 2023)

David Lizoain (Toronto, 1982) es economista. Cursó sus estudios en la Universidad de Harvard y la London School of Economics, y ha ejercido como asesor del gabinete de Presidencia en la Moncloa y del departamento de Presidente de la Generalitat de Catalunya. En 2017 publicó el ensayo El fin del primer mundo

..........................................................................................

Texto de la contraportada

"Estamos viviendo un momento decisivo para el planeta, que se encuentra al borde del colapso por culpa de las acciones humanas. En este fascinante ensayo de naturaleza optimista - aunque en ocasiones puede parecer lo contrario -, David Lizoain señala a los principales responsables de la actual emergencia climática y expone los puntos clave para un Green New Deal, ese indispensable proyecto de reestructuración económica masiva con el que lograríamos evitar el colapso y que culminaría en un nuevo régimen social y energético.

Se espera que a lo largo de esta década vayan sucediéndose incontables desastres (pandemias, olas de calor, la pérdida de hábitats hasta ahora intactos, un descenso significativo de la biodiversidad...), algunos de los cuales ya han comenzado a desplegar sus terribles efectos. Estos no hacen sino confirmar la más que urgente necesidad de una transformación sin precedentes. ¿Podemos afirmar que se está produciendo un genocidio climático? Esta es la pregunta que plantea Lizoain al inicio del libro. Su respuesta, clara y contundente, es que nadie más que el ser humano, con su obsesión por el crecimiento perpetuo, ha abonado el terreno para la catástrofe. El nuestro es ya un mundo de eco-apartheid, y el genocidio climático tiene lugar gracias a la complicidad generalizada de los poderosos. Es hora de terminar con la impunidad, movilizarse y lograr una ruptura radical con el "status quo"."

......................................................................................................................

ÍNDICE

Introducción. Vivir en la emergencia climática. 

1. De la emergencia climática al genocidio climático

2. ¿Podemos hablar de un genocidio climático?

3. El implacable impulso del mundo por acumular

4. El eco-apartheid y matar a distancia

5. La responsabilidad por el genocidio climático

6. Del castigo a la acción colectiva

7. El Green New Deal y el socialismo solar

Epílogo: vivir en tiempos de posibilidad

......................................................................................................................

RESUMEN

El autor señala que el cambio climático (con más olas de calor, inundaciones, peores huracanes y monzones, y pérdida de hielo y glaciares) implicará más personas sin acceso a agua potable ni agua potable, más migraciones forzadas, más conflictos políticos y muertes masivas. Dice que esto se ignora o se quiere ignorar (se invisibiliza) porque es "socialmente desagradable". Según Screcko Horvat estamos viviendo en un escenario "postapocalíptico". Citando a Sven Lindqvist, "para acabar con el crimen, primero hay que reconocer la realidad".

El autor señala que el cambio climático es "inequívocamente" antropogénico porque los últimos 8 años (2015-2023) han sido los más cálidos registrados hasta la fecha. Recalca que el cambio climático es un proceso lento que ahora se desarrolla rápido (el aumento de temperatura de los últimos 50 años ha sido el más rápido en 2000 años). Se habla de que hemos entrado en el "piroceno" (una edad de hielo, pero de fuego). La nieve del Ártico se está convirtiendo en lluvia antes de lo previsto, dice. Guterres advirtió que "estamos librando una guerra suicida contra la naturaleza". Se habla ya de que el aumento de temperaturas o la acidificación de los océanos generará una sexta extinción masiva porque el 25 % de los animales está en peligro y un tercio de los árboles por la tala y la agricultura. Pese a ello, las instituciones financieras han hecho tratos de 175.000 millones de dólares con los deforestadores desde el Acuerdo Climático de París en 2015 (según Global Witness). Hay una relación casi lineal entre las emisiones humanas de CO2 y los grados de calentamiento provocados. Y las emisiones continuarán a fuerte ritmo porque sigue habiendo inversiones industriales en energías fósiles.

Afirma que existe un "crimen climático" porque las élites del mundo rico no están haciendo nada por evitar las emisiones de carbono que afectarán a los más pobres a pesar de que, desde los años 60, los científicos están avisando de ello. Dice que los políticos y ejecutivos de las empresas emisoras no pueden poner como excusa que no sabían nada del calentamiento global porque desde los años 60 y 70 se han sucedido avisos, congresos y firmas de tratados para reducir el impacto del CO2. Por ello, creen que las élites actuaban con conocimiento de causa y no hicieron nada para frenar ni tampoco les importó el goteo de muertes de millones de personas que viven en los países más pobres. Por esa razón, cree que está hablando de un "crimen" o de un "genocidio" (porque las víctimas del cambio climático no serán los millonarios con superyates ni la clase media con aire acondicionado, sino aquellos habitantes pobres de países donde no pueden contrarrestar las altas temperaturas con aire acondicionado ni pueden viajar como turistas a países más templados ni disponen de unas viviendas capaces de aguantar los huracanes ni tienen alimentos si se produce una sequía prolongada en sus tierras). Dice que el "crimen climático" es sentarse de brazos cruzados, desde la distancia, a ver cómo mueren millones de personas en grandes hambrunas por las consecuencias de un cambio climático que los países pobres no han generado sino los ricos. Cree que hay motivos suficientes para sentar en el banquillo a los ejecutivos y directivos que planeen seguir abriendo más pozos petrolíferos o invirtiendo en industrias de combustibles fósiles a pesar de que conocen el grave daño que están ocasionando al planeta y a las generaciones futuras sin que hayan cesado en su actitud sino todo lo contrario.

David Lizoain explica que, siguiendo a otros autores, hay que cuatro tipos de responsabilidad respecto al "crimen climático": la directa (el propio emisor que ignora deliberadamente los efectos de los combustibles fósiles), la imprudente, la negligente y la de los votantes que votan a partidos defensores del crecimiento mediante combustibles fósiles, que permiten las emisiones de gases a la atmósfera y la contaminación. En este último caso, serían también responsables los ciudadanos de cada país que permiten esas políticas de crecimiento con calentamiento global y de acumulación. 

Describe el "crimen climático" como un "crimen administrativo" o "crimen burocrático" basado en políticas o no políticas que impiden a los residentes de zonas arrasadas por el calor refugiarse en el 

Respecto a las víctimas, Lizoain recalca que desde el primer mundo se lanza un mensaje de que los grandes huracanes e inundaciones que provocará el cambio climático afectarán a la gente pobre de países subdesarrollados, con lo que ya se les está señalando como los "otros" y las élites están dando un mensaje tranquilizador para la clase media de los países ricos de que esas personas pobres serían las "sacrificadas" por culpa del cambio climático. El hecho de señalarlos como los "otros" demoniza a los más pobres como posibles refugiados ambientales, inmigrantes que huyen de las sequías y la pobreza en sus países desertizados o inundados por la subida del mar. 

A ello se suma lo que denomina "eco-apartheid", una forma de no permitir que los pobres se refugien en el mundo templado y rico de Europa o Estados Unidos. Para ello Europa está instalando barreras en el Mediterráneo (y prohíbe los salvamentos) y Estados Unidos protege su frontera del sur frente a los inmigrantes y los refugiados climáticos.

En cuanto a las leyes y la justicia internacional, el autor duda de que la Corte Penal Internacional (CPI) tenga competencias para sentar en el banquillo por crímenes contra la humanidad a los directivos y ejecutivos de grandes petroleras y grupos energéticos o la industria basada en combustibles fósiles. Apuesta por esa solución pero también ve viable la de los "tribunales civiles" (como los creados por Russell y Sartre durante la Guerra de Vietnam en los años 1968) para condenar todos los abusos militares contra la población civil, no solo los del enemigo derrotado. Se haría algo parecido con los abusos del clima, para que todos los ejecutivos de la energía fósil supiesen a que atenerse en caso de seguir contaminando el planeta.

Finalmente, cree que la política de New Green Deal sería una buena idea para descarbonizar las economías. Recuerda que no hay que culparse a sí mismo por comer carne o viajar en avión sino que esto forma parte de una estructura mucho mayor basada en una economía de energía fósil que habrá que sustituir.




miércoles, 19 de julio de 2023

"Menos es más", de Jason Hickel (2021)

 Resumen del libro "Menos es más", de Jason Hickel (2021)

Resumen original y actualizado en:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/07/menos-es-mas-de-jason-hickel-2021.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación y licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, economía, decrecimiento, postcapitalismo, cambio climático

.............................................................................................................

Ficha técnica

Título: "Menos es más"

Subtítulo: Cómo el decrecimiento salvará el mundo

Título en inglés: Less is More: How Degrowth Will Save the World 

Autor: Jason Hickel

Publicación en inglés: 2021

Publicación en español: Capitán Swing Libros SL, Madrid, 2023

Número de páginas: 310

.............................................................................................................

Texto de la contraportada

"Nuestro planeta está en problemas, pero ¿cómo podemos revertir la crisis actual y crear un futuro sostenible? El mundo ha despertado por fin a la realidad del colapso climático y ecológico, ahora debemos enfrentarnos a su causa principal. El capitalismo exige una expansión perpetua, que está devastando el mundo, y sólo hay una solución que conducirá a un cambio significativo e inmediato: el decrecimiento. Si queremos tener una oportunidad de detener la crisis, tenemos que frenar y restablecer el equilibrio. Cambiar nuestra forma de ver la naturaleza y nuestro lugar en ella, pasando de una filosofía de dominación y extracción a otra basada en la reciprocidad y la regeneración. Tenemos que evolucionar más allá de los dogmas del capitalismo hacia un nuevo sistema adecuado para el siglo XXI. ¿Pero qué pasa con el empleo? ¿Y la salud? ¿Y el progreso? Jason Hickel aborda estas cuestiones y ofrece una visión inspiradora de cómo podría ser una economía poscapitalista: una economía más justa, más solidaria y que no solo nos sacará de la crisis actual, sino que nos devolverá el sentido de conexión con un mundo rebosante de vida. Tomando menos, podemos llegar a ser más. Hickel nos muestra cómo podemos devolver a nuestra economía el equilibrio con el mundo vivo y construir un futuro mejor".

.............................................................................................................

ÍNDICE

Prólogo de Kofi Mawuli Klu y Rupert Read

Introducción. Bienvenidos al Antropoceno

Parte I. Más es menos

01. Capitalismo: los orígenes

02. El avance de la bestia

03. ¿Nos va a salvar la tecnología?

Parte II. Menos es más

04. Secretos del buen vivir.

05. Vías hacia un mundo poscapitalista

06. Todo está conectado

.............................................................................................................

RESUMEN

La idea de este libro surgió tras la crisis financiera del 2008 cuando el autor Jason Hickel y su esposa Guddi, una médico de la sanidad pública del Reino Unido, fueron a una conferencia de Paul Krugman en el 2012 en Londres y, al salir, hablaron sobre posibles soluciones para salir del atolladero. Hickel propuso como Krugman la receta del crecimiento económico y de que EE.UU. debía hacer un enorme estímulo gubernamental para volver a impulsar el crecimiento. Mientras paseaban Guddi se preguntó en voz alta si Estados Unidos necesitaba crecer más cuando había países que hacían más con menos (en el libro, el autor menciona como ejemplos a Costa Rica y Portugal, entre otros, con menos PIB que EE.UU. pero mayor nivel de esperanza de vida, que a fin de cuentas es lo que importa). El autor se dio cuenta de que estaba repitiendo el "mantra de siempre" del eterno crecimiento y se quedó intranquilo y se calló.

El antropólogo Jason Hickel defiende el decrecimiento como fórmula para reducir el impacto del cambio climático. Aclara que algunos críticos equiparan el decrecimiento con una nueva versión de la austeridad pero es "justamente lo contrario". Dice que la austeridad aboga por la escasez para generar más crecimiento mientras que el decrecimiento aboga por la abundancia para volver innecesario el crecimiento. "Si queremos evitar el colapso climático, el ecologismo del siglo XXI tiene que articular una nueva reivindicación: la reivindicación de una abundancia radical", dice el autor. La economía produciría menos pero porque se necesitaría menos y, en términos generales, habría una abundancia mucho mayor. Aunque el PIB disminuyese (y restase beneficios a una élite), la riqueza pública aumentaría, mejorando la vida del resto de la sociedad. Ve una paradoja: la abundancia se revela como el antídoto contra el crecimiento. "Neutraliza el propio imperativo del crecimiento, al permitirnos frenar la bestia [del consumismo capitalista] y liberar de su yugo al mundo viviente", dice Hickel. Recuerda unas palabras de Giorgos Kallis, en su libro Límites: "El capitalismo no puede funcionar en condiciones de abundancia". 

Entre las soluciones que Hickel propone para frenar el crecimiento económico antiecológico y converger hacia una economía postcapitalista figuran: 1) Poner fin a la obsolescencia programada 2) Limitar la publicidad 3) Pasar de la propiedad al usufructo 4) Acabar con el desperdicio de alimentos 5) Reducir el tamaño de las industrias ecológicamente destructivas. Otras soluciones consisten en reducir la jornada laboral (para ajustar el menor empleo al decrecimiento), reducir la desigualdad, desmercantilizar los bienes públicos y ampliar el procomún, aplicar una ley del jubileo para cancelar las deudas, crear dinero nuevo para una economía nueva y avanzar en la democracia (entendida como igualdad y bienestar de todos).

Para Hickel, el decrecimiento representa la descolonización, tanto de las tierras como de las personas y las mentes. Representa el descercamiento del procomún, la desmercantilización de los bienes públicos y la desintificación del trabajo y de la vida. Representa la descosificación de los seres humanos y de la naturaleza y la desescalada de la crisis ecológica. Es tomar menos de nuestro entorno y abrir un mundo de posibilidades: El decrecimiento "nos traslada de la escasez a la abundancia, de la extracción a la regeneración, de la dominación a la reprocidad y de la soledad y la separación a la conexión con un mundo efervescente de vida". Aboga por una relación con el mundo de reprocidad y cuidado frente a otra de dominación y extracción. 

En el capítulo 1,  Hickel describe cómo el ascenso del capitalismo requirió de la creación de escasez artificial (cercaron los montes comunales para obligar a los campesinos, que antes se autoabastecían en una economía de subsistencia, a trabajar en la industria y aceptasen trabajar con salarios bajos a riesgo de morir de hambre y mejorar la productividad a base de una fuerte competencia y a su vez unirse a la masa de consumidores). Esa lógica de la escasez artificial pervive hoy: los trabajadores se sienten amenazados por el desempleo, deben ser cada vez más disciplinados y productivos para eludir el despido o que lo reemplacen por alguien más desesperado. Pero si la productividad aumenta, se producen despidos y los Gobiernos se ven obligados a hacer políticas de crecimiento y los trabajadores les votan. El autor replica que esa productividad podría revertir en los trabajadores mediante salarios más altos y jornadas más cortas. Además, los beneficios del crecimiento van despacísimo hacia abajo, hacia los trabajadores (la promesa del goteo o de que todos los barcos suben con la marea alta). A ello se suma que la desigualdad genera una escasez artificial de bienestar (al envidiar al vecino). Y también hay escasez de tiempo libre que nos obliga a pagar empresas para hacer la comida, limpiar la casa, jugar con nuestros hijos, cuidar de los padres mayores. El exceso de trabajo genera estrés y eso alimenta la industria de los antidepresivos, pastillas para dormir, dietas, terapia de pareja, vacaciones caras, y cosas que no necesitamos, lo que obliga a trabajar más para pagar esos productos. La escasez también afecta a los bienes públicos después de la ola privatizadora de los años 80 de la educación, la sanidad, el agua, la vivienda, la seguridad social, etc... Ante esta escasez, la gente se ve obligada a adquirir servicios privados. Finalmente, la austeridad de 2008 socavó lo que que quedaba de bienes públicos y protección social (ayudas a jubilados, prestaciones de desempleo, salarios de funcionarios) para que los "vagos" se sientan amenazados por el hambre y vuelvan a trabajar.

El autor Jason Hickel explica que el capitalismo se basa en producir escasez artificial, lo que sirvió de motor para acumular capital, y, a pesar del mito, no genera muchísimas cosas ni abundancia. El crecimiento no se basa en satisfacer las necesidades humanas sino en evitar satisfacerlas. "Es irracional y ecológicamente violento", dice Hickel. Surgió con los cercamientos (la privatización de los montes de mano común o comunales) en el siglo XVIII y XIX, lo que generó numerosa mano de obra para la incipiente industria, con salarios bajos y jornadas extenuantes. Añade que el capitalismo no es similar al comercio (comprar barato y vender caro para generar un beneficio con el que ganarse la vida) sino que el dinero se emplea para generar una producción que genera más dinero y el cual ser reinvierte en la producción, y volver a reinvertir, o lo que es lo mismo el capitalismo necesita el crecimiento para acumular capital, porque el dinero no se usa para comer (valor de uso) sino para acrecentar el capital (valor de cambio). Y eso obliga a un continuo crecimiento.

Por otro lado, el capitalismo lleva adherido el llamado dualismo: la separación del cuerpo de la mente (al estilo cartesiano) y la separación del hombre de la Naturaleza. El cuerpo y la Naturaleza se convierten en "cosas" a las que subyugar y explotar. Dado que los recursos de la Naturaleza son gratis, se puede explotar y destrozar a coste cero, porque tampoco se paga por las externalidades (la contaminación de los ríos, mares y aire, el deterioro medioambiental, el cambio climático). Y esa explotación de la naturaleza se traduce en ir allí donde están los recursos naturales para cogerlos gratis, lo que en el siglo XIX derivó en una carrera colonialista por colonizar el Salvaje Oeste, África o Asia, esclavizando o explotando a los nativos, puesto que el hombre también es un "recurso humano". La tesis del libro es que el capitalismo impulsa un crecimiento continuo (del que son rehenes los países, ya que nadie quiere reducir su PIB sino aumentarlo cada año) que está devorando los recursos del planeta y llevando al colapso al medio ambiente. La solución pasaría por un decrecimiento, que no significa que un país deba reducir el PIB sino que solo produzca aquello que es necesario y no despilfarre.

El autor pone como ejemplo a Portugal, Costa Rica o Finlandia, que con un PIB muy inferior a Estados Unidos han logrado una mayor esperanza de vida gracias a que el Estado ha invertido en sanidad y educación para toda la población, la cual no tiene que estresarse para ganar más dinero ni trabajar más para pagar cosas básicas como el médico privado o la universidad privada. Según el autor, esos países, entre otros, demuestran que se puede hacer más con menos dinero y vendrían a avalar que no es necesario que el PIB siga creciendo indefinidamente sino que hay que distribuirlo entre todos. Añade que la felicidad tiene una barrera a partir de la cual nadie es más feliz por mucha riqueza que tenga y que todos son más felices si tienen la misma riqueza que sus vecinos y no hay competencia por exhibir su poderío económico. Por tanto, el autor propone evolucionar hacia otro tipo de economía más distributiva, en la que se invierta en sanidad y educación para todos, y donde el crecimiento enfermizo del PIB no es una preocupación porque lo que realmente interesa es que la economía sea sostenible y genere un bienestar general a toda la población y no a unos pocos. El crecimiento del PIB dejará de tener sentido y ya no preocupará lo más mínimo porque habrá otras mediciones distintas basadas en el medio ambiente o la salud y educación de los residentes.

Una de las soluciones que plantea Jason Hickel es cobrar en impuestos la mitad de sus ganancias al 0,1 % más rico del mundo (se recaudarían 19 billones de euros; la mitad bastaría para acabar con el hambre en el mundo). El autor aclara que los impuestos gravarían las rentas (lo que ingresan cada año) pero no la riqueza que ya poseen (165 billones). Poniendo impuestos a los ultrarricos, dice el autor, disminuiría el PIB por sí solo (habría decrecimiento) sin perjudicar a nadie y, además, mejoraría el medioambiente porque ya no viajarían tanto en su jet privado ni harían vacaciones a lugares lejanos.

Otras soluciones que aportó en su libro Divide fueron crear un salario mínimo interprofesional de alcance global (o al menos, que a nivel local sea el necesario para vivir). Otra idea es poner fin a la evasión fiscal con leyes que regulen el comercio transfronterizo y la contabilidad corporativa. También sugiere democratizar instituciones como el Banco Mundial o el FMI (ahora en manos de los países ricos que controlan el voto) para que el Sur global pueda participar en las decisiones que le afectan y ganar más dinero con sus exportaciones (1,5 billones de dólares más). Propone condonar las deudas odiosas para que los países pobres inviertan en educación y sanidad, poner fin a las expropiaciones de tierras por grandes empresas y repartir las tierras entre pequeños agricultores, reformar los regímenes de subvenciones (que dan ventaja a la rica industria agrícola). 

El autor añade que el relato del crecimiento del PIB es ideológico, una vez que se comprende la magnitud de las desigualdades a nivel nacional y mundial. Lo define como un conjunto de ideas promovido por la clase dominante que favorece sus intereses materiales y que el resto del mundo ha interiorizado como propios (hegemonía cultural). Con el crecimiento y el progreso humano, lo que las élites reivindican, dice el autor, es acelerar los mecanismos de acumulación. Algo de ese crecimiento mejora la vida de los pobres pero esto ya no es sostenible en una época de crisis ecológica, dice Hickel.

El autor insiste en que el crecimiento del PIB mide la salud del capitalismo pero no la situación real de la población, ya que mucha es pobre o tiene una esperanza de vida más baja que la media (caso de Estados Unidos). Por ello, no ve correlación entre un mayor crecimiento del PIB y una mayor esperanza de vida, sino que la correlación sí existe en un mayor acceso a la salud general (inversiones públicas en alcantarillado, agua potable, sanidad pública) de toda la población, lo que sí eleva la esperanza de vida. Aboga por invertir en sanidad pública y educación pública para rebajar la factura del sector privado en Estados Unidos, que es exageradamente elevada e inflada. Dice que las familias se desesperan por conseguir medio millón de dólares para pagar la universidad de sus hijos, un dinero que se ahorrarían si la enseñanza de calidad fuese pública. Invertir en lo público supondría reducir el PIB o decrecer sin causar perjuicios, sino todo lo contrario. Insiste en que el decrecimiento no es malo si lo que se elimina son los despilfarros (como la obsolescencia programada de los productos de consumo y anima a legislar en ese sentido para que los aparatos duren más tiempo o las compañías se vean obligadas a garantizar sus productos durante una década o tengan obligación de reparar las piezas dañadas).

[nota del lector: si se redujese el PIB, habría menos dinero en circulación y el efecto multiplicador del dinero al cambiar a menos manos también se vería reducido, siguiendo a Keynes]

El autor advierte que el crecimiento está sobrepasando los "límites planetarios" pero eso no impedirá que el PIB siga al alza aunque el planeta esté colapsando porque habrá nuevos sectores económicos emergentes como las defensas costeras, la militarización de las fronteras, la explotación minera del Ártico y las plantas desalinizadoras. Incluso las energías verdes obligan a extraer muchos minerales y siguen generando contaminación. Algunos Gobiernos ya están tomando posiciones para sacar partidos de posibles catástrofes ecológicas [nota: por ejemplo, la nuevas rutas marítimas y las plataformas petrolíferas por el deshielo del Ártico].

El libro finaliza con una visión de los indígenas y de Spinoza. Al contrario que Descartes, creen que no hay una dualidad (naturaleza-hombre, mente-cuerpo) sino que todos los seres vivos comparten un mismo origen y están interconectados para mantener el equilibrio de los ecosistemas, y el hombre está obligado, como un ser vivo más, o tomar solo lo justo de la naturaleza y devolverle el favor. Pero lejos de estas culturas animistas, cercanas a la idea de Gaia de Lovelock, lo que hace el mundo capitalista actual es arrasar con todo para crear cultivos extensivos de cereales, dice el autor, tomando gratis más de lo que necesita y sin dar nada a cambio, y además destruyendo el hábitat de otros seres sintientes como los animales o las plantas. 

..................................................................................................................................................................


500 RESÚMENES DE LIBROS  DE ECONOMÍA Y SOCIOLOGÍA
"DE ADAM SMITH A LA INFLACIÓN EN POSTPANDEMIA (1776-2023)"

por E.V.Pita (2023)

Link al compendio de resúmenes:
https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/01/500-resumenes-de-libro originals-de-economia-y.html
Descargar el PDF en este enlace:


...............................................................................................................

domingo, 5 de marzo de 2023

"Contra la sostenibilidad", de Andreu Escrivá (2022)

..................................................................................................................................................................


500 RESÚMENES DE LIBROS  
DE ECONOMÍA Y SOCIOLOGÍA
"DE ADAM SMITH A LA INFLACIÓN EN POSTPANDEMIA (1776-2023)"

por E.V.Pita (2023)

Link al compendio de resúmenes:
https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/01/500-resumenes-de-libro originals-de-economia-y.html
Descargar el PDF en este enlace:

...............................................................................................................

Resumen del libro "Contra la sostenibilidad", de Andreu Escrivá (2022)

Resumen original y actualizado del libro en:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2023/03/contra-la-sostenibilidad-de-andreu.html

Resumen elaborado por E. V. Pita, doctor en Comunicación Contemporánea, licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, sostenibilidad, medio ambiente, crisis climática, cambio climático, energías renovables, ecología

..................................................................................................................................................

Ficha técnica

Título: "Contra la sostenibilidad"

Subtítulo: Por qué el desarrollo sostenible no salvará al mundo (y qué hacer al respecto)

Autor: Andreu Escrivá

Editorial: Arpa, Barcelona, 2022

Número de páginas: 254

..................................................................................................................................................

Biografía del autor Andreu Escrivá (hasta 2022)

 Andreu Escrivá (Valencia, 1983) es licenciado en Ciencias Ambientales, máster en Biodiversidad y Conservación de Ecosistemas y doctor en Biodiversidad por la Universitat de València. Formó parte del Comité de Expertos del Cambio Climático de la Comunitat Valenciana entre 2016 y 2017, y es miembro del Grupo de Expertas y Expertos de Emergencia Climática de Barcelona desde mayo de 2021. Colabora regularmente en medios de comunicación como Àpunt, El País, El Temps, Mètode o Climática. Participa de forma habitual en eventos, cursos y seminarios sobre ciencia, comunicación y medio ambiente.

Ha publicado Aún no es tarde: claves para entender y frenar el cambio climático (XXII Premio Europeo de Divulgación Científica Estudio General) y Y ahora yo qué hago: cómo evitar la culpa climática y pasar a la acción. Se define a sí mismo como "pesado climático".

..................................................................................................................................................

Texto de la contraportada 

"¿Qué es la sostenibilidad? Haz la prueba: búscalo en Google. Verás un montón de fotos de stock, recreaciones de la Tierra dibujada entre flechas que simbolizan el reciclaje, montajes con unas manos que la sostienen con extremo cuidado, bombillas cubiertas de césped... Estamos inmersos en una gran confusión que nos induce a pensar que si algo es sostenible significa que "cuida del planeta". Pero no es así.

La sostenibilidad se ha transformado en una brújula averiada que, en vez de hacernos progresar hacia el futuro, nos aleja de él con falsas promesas de cambio. La economía circular, la neutralidad de carbono, el coche eléctrico o las finanzas verdes son solo algunos de los cimientos sobre los que se edifica la sostenibilidad, convertida en un elemento más de la mercadotecnia empresarial e institucional. Para construir un mundo nuevo y recuperar el futuro necesitamos, antes que nada, desmontar los andamios económicos, ambientales y sociales sobre los que se asienta el desarrollo sostenible. Solo así seremos capaces de planificar un bienestar compartido y democrático, en el que decidamos por dónde transitar dentro de los límites de lo posible, sin ser deslumbrados por el brillo cegador de las promesas vacuas de la sostenibilidad". 

..................................................................................................................................................

ÍNDICE

Primera parte

El por qué

El origen

El camino


Segunda parte

Contra la neutralidad climática

Contra la extralimitación y la geoingeniería

Contra el mantra de las generaciones futuras

Contra la superpoblación y los superricos

Contra la huella de carbono

Contra la energía que salvará el planeta

Contra la transición ecológica

Contra la dominación de la naturaleza

Contra el ecomodernismo

Contra el catastrofismo

Contra la economía circular

Contra el reciclaje

Contra el coche eléctrico

Contra las finanzas sostenibles


Tercera parte

Insostenible

Significado y significante

Nombrar lo desconocido

La conversación

Erosión y progreso

Futuro


Tres breves epílogos

Epílogo uno: luciérnagas en la oscuridad

Epílogo dos: contra este libro

Epílogo tres: tu espacio

.........................................................................................................................................

RESUMEN 

El autor Andreu Escrivá cree que respecto a la sostenibilidad se ha hecho mucho "greenwashing" (lavado de cara de las empresas para dar una falsa imagen de ecológicas). Considera que el principal problema es que hay que optar por una solución que cambie el sistema actual consumista: pone como ejemplo que si triunfase el coche eléctrico, la lógica actual consistiría en desbrozar bosques para hacer nuevos carriles para coches eléctricos. Es decir, las soluciones que se proponen actualmente o pecan de ser insuficientes o apenas contribuyen a reducir las emisiones de CO2 (en el confinamiento del 2020, con toda la población en casa, solo bajaron un 17 %) porque hay un problema estructural de fondo, que es el sistema de producción que causa estas emisiones de energías fósiles unidas a un desaforado nivel de consumo, no en todos los países sino en unos cuantos privilegiados. 

En primer lugar, arremete contra palabras huecas como "huella de carbono" o "sostenibilidad" porque son usadas por el "marketing" de las empresas para lavar su imagen, sobre todo porque algunas se comprometen a reducir su huella... en el 2030 o 2050, no ahora. Y es la urgencia y la inmediatez lo que obliga a reducir cuanto antes las emisiones de carbono para cumplir los objetivos de 1,5 grados, pero el problema se pospone eternamente, se culpabiliza al ciudadano por no llevar una vida "ecosostenible" o por meterle el problema a las generaciones futuras (algo que precisamente no ayuda a movilizar a las generaciones presentes. Y el autor recuerda que en los años 50 ya se hablaba del calentamiento de la tierra que afectaría a los nietos de 1980, y nadie movió un dedo). 

Respecto a las energías renovables, dice que su incidencia es muy baja y aunque se empezasen a construir centrales nucleares (a razón de 10.000 millones de euros cada una), habría que construir muchas y eso requiere su tiempo. Respecto a la energía solar, aunque algunos labriegos se quejan de que las granjas de placas solares invaden sus campos más fértiles, el autor admite que no hay que ser ingenuo y que en algún lugar hay que ponerlos, evitando eso sí dañar los campos productivos. Aunque se pusiesen en la ciudad, eso solo contribuiría en un 30 % al gasto energético urbano. 

En cuanto a la sostenibilidad, cree que esta palabra es hueca, vale para todo y algunas empresas contaminantes están encantadas de imprimir esta palabra en sus etiquetas porque les da un toque verde y las convierte en solidarias con el planeta. Así que todos los productos a la venta se han vuelto "sostenibles", muchos de ellos sin serlo. Y hace una prueba: si nos preguntan qué es algo insostenible, todo el mundo sabe definirlo pero si nos preguntar por la sostenibilidad, la gente se pierde en una maraña de confusión, porque efectivamente así lo es.

Otro punto que rechaza es la culpa individual por no cumplir con su reducción de la huella de carbono (un concepto que se le ocurrió a la petrolera BP para mejorar su imagen amigable con el planeta). Cree que aunque haya millonarios que viajen en jet privado a conciertos solidarios con el clima, su peso respecto a las emisiones es mínimo, lo mismo que el ciudadano que no mete la basura en el contenedor de reciclables o no va en bici al trabajo. La acción individual es irrisoria y lo que sí genera un cambio es la acción colectiva para reducir la huella de carbono y eso pasa porque las grandes empresas contaminantes que siguen vertiendo CO2 en el aire reduzcan sus emisiones, algo que se han comprometido a realizar... a largo plazo. En una economía en crecimiento basada en un 80 % en la quema de combustibles fósiles (que no dejan de ser gases tóxicos)... el CO2 seguirá cubriendo la atmósfera y calentando el planeta.

Respecto a la geoingeniería, el autor también duda de su utilidad, entre otras cosas porque aunque se lograsen fabricar a gran escala máquinas de secuestro de CO2 para compensar las emisiones, se entablaría una carrera de décadas para no perder el paso mientras la contaminación seguía escalando en una economía en crecimiento mientras las máquinas absorbían al límite de su capacidad el sobrante de gases para dejar todo equilibrado. Pero no se resolvería el problema inicial de las emisiones y además estas aumentarían respecto al presente (aunque luego fuesen limpiadas). Un fallo y el mundo, con 600 partes de CO2 por millón, en vez de los actuales 420, se quedaría cubierto por una nube tóxica.


 

domingo, 25 de julio de 2021

"Los números no mienten", de Vaclav Smil (2020)

 Resumen del libro "Los números no mienten", de Vaclav Smil (2020)

Resumen original y actualizado en el siguiente link:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2021/07/los-numeros-no-mienten-de-vaclav-smil.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación, licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, estadística, probabilidades, ecología, transporte

..................................................................................................................................................................

500 RESÚMENES DE LIBROS  DE ECONOMÍA Y SOCIOLOGÍA

"DE ADAM SMITH A LA INFLACIÓN EN POSTPANDEMIA (1776-2023)"

por E.V.Pita (2023)

Link al compendio de resúmenes:

Descargar en PDF en este enlace:
....................................................................................................................................................

Ficha técnica:

Título: "Los números no mienten"

Subtítulo: "71 historias para entender el mundo"

Título en inglés: Numbers Don't Lie: 71 Things You Need to Know About the World

Autor: Vaclav Smil

Fecha de publicación en inglés: 2020

Edición en español: Debate, Penguin Random House Grupo Editorial SAU, Barcelona, 2021

Número de páginas: 332

..........................................................................................................................................

Biografía del autor Vaclav Smil

Vaclav Smil (nacido en Europa del Este) es profesor emérito de la Universidad de Manitoba, en Winnipeg, Canadá. Es autor de una cuarentena de libros que abordan desde la renovación energética hasta la producción de alimentos, pasando por las innovaciones tecnológicas, los cambios medioambientales y de población, las políticas públicas y las evaluaciones de riesgo. Es miembro de la Royal Society de Canadá y de la Orden de Canadá.

..........................................................................................................................................

Texto de la contraportada

¿Es peligroso volar? ¿Qué es peor para el medioambiente: un coche o un móvil? ¿Cuánto pesan todas las vacas del mundo juntas y por qué ese dato importa? ¿Se puede medir la felicidad?

La misión de Vaclav Smil es convencernos de que los hechos son relevantes. Científico medioambiental, analista de políticas públicas y autor tremendamente prolífico, es el referente de Bill Gates cuando se trata de entender el mundo.

En "Los números no mienten" nos embarcamos con Smil en una fascinante expedición en busca de datos que desafían nuestras preconcepciones, al tiempo que nos invita a ver con nuevos ojos el impacto de las transformaciones del mundo moderno sobre la sociedad y el medioambiente. Basado en divertidos ejemplos, estadísticas y gráficas asombrosas, este libro es la combinación perfecta de ingenio, historia y ciencia que cambiará la manera en que vemos el mundo.

Es posible que "Los números no mientan" pero ¿qué verdad transmiten?

..........................................................................................................................................

ÍNDICE


Personas. Los habitantes de nuestro mundo

¿Qué ocurre cuando tenemos menos niños?

¿El mejor indicador de la calidad de vida?

¿Qué tal la mortalidad infantil?

El mejor retorno de la inversión: la vacunación

Por qué es difícil predecir la gravedad de una pandemia mientras está ocurriendo

Alcanzar mayor estatura

¿Está la esperanza de vida por fin alcanzando un tope?

Cómo sudar mejoró nuestra capacidad de cazar

¿Cuántas personas se necesitaron para construir la Gran Pirámide?

¿Por qué las cifras de desempleo no cuentan toda la historia?

¿Qué hace feliz a la gente?

El surgimiento de las megaciudades


Países. Las naciones en la era de la globalización

Las prolongadas tragedias de la Primera Guerra Mundial

¿Es Estados Unidos realmente excepcional?

Por qué Europa debería estar más satisfecha consigo misma

Brexit: las realidades que más importan no cambiarán

Inquietud sobre el futuro de Japón

¿Hasta dónde puede llegar China?

India frente a China

Por qué la producción industrial sigue siendo importante

Rusia y Estados Unidos: las cosas nunca cambian

Imperios en declive: nada nuevo bajo el sol


Máquinas, diseños, aparatos. Los inventos que crearon el mundo moderno

Cómo la década de 1880 creó el mundo moderno

Cómo los motores eléctricos mueven la civilización moderna

Transformadores: esos dispositivos silenciosos y pasivos

Por qué aún no deberíamos dar al diésel por acabado

Capturar el movimiento: de los caballos a los electrones

Del fonógrafo al "streaming"

La invención de los circuitos integrados

La maldición de Moore: por qué el progreso técnico lleva más tiempo del que pensamos

La irrupción de los datos: demasiados y demasiado rápido

Ser realistas sobre la innovación

Combustibles y electricidad. La energía de nuestras sociedades

Por qué las turbinas de gas son la mejor opción

Electricidad nuclear: una promesa incumplida

Por qué necesitamos combustibles fósiles para obtener electricidad del viento

¿Qué tamaño puede llegar a tener una turbina?

La lenta irrupción de las células fotovoltaicas

Por qué la luz solar sigue siendo la mejor

Por qué necesitamos baterías más grandes

Por qué no es fácil tener buques portacontenedores eléctricos

El verdadero coste de la electricidad

El ritmo inevitablemente lento de las transiciones energéticas


Transporte. Cómo nos movemos

Acortar la travesía del Atlántico

¡Los motores son más antiguos que las bicicletas!

La sorprendente historia de las ruedas inflables

¿Cuándo comenzó la era del automóvil? 

Los coches modernos tienen una pésima razón entre peso y carga

Por qué los coches eléctricos (aún) no son tan estupendos como creemos

¿Cuándo comenzó la era de los aviones a reacción?

Por qué el queroseno es el rey

¿Cuán seguro es volar?

¿Qué medio de transporte tiene mayor eficiencia energética: el avión, el tren o el automóvil?

Alimentos. Energía para nosotros mismos

El mundo sin amoníaco sintético

Multiplicar el rendimiento de las cosechas de trigo

La inexcusable magnitud del desperdicio alimentario mundial

El lento "addio" a la dieta mediterránea

Atún rojo: camino de la extinción

Por qué se impone el pollo

(No) beber vino

Un consumo racional de carne

La dieta japonesa

Productos lácteos: contratendencias


Medioambiente. Dañar y proteger nuestro mundo

Animales y artefactos: ¿cuáles son más diversos?

El planeta de las vacas

La muerte de los elefantes

Por qué pueden ser prematuros los manifiestos a favor del Antropoceno

Hechos de hormigón

¿Qué es peor para el medioambiente: nuestro automóvil o nuestro teléfono?

¿Quién tiene mejor aislamiento?

Ventanas de triple cristal: una solución energética transparente

Aumentar la eficiencia de la calefacción doméstica

Con el carbono hemos topado.


..........................................................................................................................................

RESUMEN

En este libro, el autor Vaclav Smil examina distintas situaciones actuales del mundo y calcula datos sobre las posibles tendencias, con lo que desmitifica creencias o aclara cuál es la mejor solución. El autor está entre los preferidos de Bill Gates (quien también cuenta en su libro Cómo evitar un desastre climático que tuvo que leer muchos libros y examinar muchos números para llegar a una conclusión). El autor añade que no se fía de los datos que circulan por Internet y que los recoge exclusivamente de anuarios y estadísticas oficiales y de organismos mundiales, porque los valores en dinero están expresados en paridad de poder adquisitivo. Sus fuentes son las estadísticas de ámbito mundial publicadas por organizaciones globales, anuarios publicados por instituciones nacionales. estadísticas históricas recopiladas por las agencias nacionales y artículos publicados en revistas científicas. A ello, añade monografías de grandes consultoras.

En su libro, hace algunas referencias a España y el mundo latino. Concretamente, que la esperanza de vida en muchos países latinoamericanos está entre las 50 más altas del mundo, lo que atribuye a su herencia católica y española.

Entre sus cálculos figura el hecho de que no se necesitaron turnos de más de 10.000 trabajadores (a lo largo de 20 años) para levantar las pirámides de Egipto. 

Otra crítica es al Antropoceno (la edad geológica en la que los humanos transforman el ambiente y lo contaminan todo). Dice que solo pasaron 10.000 años frente a los millones de años de otros tiempos geológicos o el propio Holoceno (que es bastante reciente).

Sobre el diésel, dice que es bastante competitivo y efectivo, por lo que se usa en el transporte marítimo de contenedores, que queman combustibles fósiles de baja calidad. Duda de que el diésel desaparezca.

Otra idea es sobre el auge de China y el estancamiento de Japón: ambos países tienen la población estancada o, en declive, por lo que no podrán crecer mucho más. Augura un estancamiento para China debido al declive poblacional.

También examina las energías alternativas y ecosostenibles y es pesimista pues, al igual que Bill Gates, cree que no tienen bastante potencia ni pueden surtir a barcos portacontenedores (pues las baterías consumirían mucho espacio y peso). Aunque hay barcos eléctricos en Noruega, estos no hacen más de 300 kilómetros de recorrido, nada que ver con las rutas transoceánicas. Por esto mismo, piensa que el fuel es el rey (muy barato).

Una idea para reducir el cambio climático es poner ventanas de tres hojas o cristales porque ayudarían a mantener el calor en invierno y el frescor en verano, al ser muy aislante. También recuerda que los tabiques de pladur son mucho más aislantes que el ladrillo, por lo que también contribuirían a reducir el gasto energético de calentar los hogares.



domingo, 18 de julio de 2021

"La explosión demográfica", de Paul R. Ehrlich y Anne H. Ehrlich (1989)

 Resumen del libro "La explosión demográfica", de Paul R. Ehrlich y Anne H. Ehrlich (1994)

Resumen original y actualizado en el siguiente link:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2021/07/la-explosion-demografica-de-paul-r.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación y licenciado en Derecho y Sociología.

Sociología, explosión demográfica, demografía, recursos, ecología

................................................................................................

Ficha técnica: 

Título:  "La explosión demográfica"

Subtítulo: El principal problema ecológico

Título en inglés: "The population explosion"

Autores:  Paul R. Ehrlich y Anne H. Ehrlich

Publicación en inglés: 1989 

Editorial en español: Salvat Editores, Barcelona, 1994

Número de páginas: 334

................................................................................................

Biografía de los autores (hasta 1994)

Paul R. Ehrlich es profesor de biología de la Universidad de Stanford. Experto en ecología humana y evolución, ha escrito numerosos libros de divulgación sobre estos temas, entre los que destaca The population bomb.

Anne H. Ehrlich es asimismo autora de múltiples artículos y libros sobre demografía y medio ambiente, y ha sido asesora del Gobierno de la EE.UU. en el informe Global 200.

................................................................................................

Texto de la contraportada

El crecimiento imparable de la población mundial, que en la actualidad supera los 5.500 millones de personas, y aumenta a un ritmo de cien millones por año, constituye el mayor problema con el que se enfrenta la Humanidad. Las consecuencias más inmediatas de la explosión demográfica son el calentamiento global de la atmósfera, la destrucción de las reservas de petróleo y carbón, la pérdida de suelos fértiles, el hambre, etc... Los autores exponen y analizan este estado de cosas llamando la atención acerca de sus repercusiones tanto en los países del Tercer Mundo como en los desarrollados.

................................................................................................

ÍNDICE

I. ¿Por qué no está todo el mundo tan asustado como nosotros?

II. El fin de la abundancia

III. Las masas críticas

IV. Los alimentos: el último recurso

V. Ecología de la agricultura

VI. La salud del ecosistema mundial

VII. La población y la salud pública

VIII. La población, el afán de crecimiento y la seguridad nacional

IX. La explosión, el gemido, la alternativa

X. Conexiones y soluciones: I

XI. Conexiones y soluciones; II

XII. Lo que usted puede hacer

Apéndice: Algunas precisiones sobre el funcionamiento de la Tierra

...........................................................................................

RESUMEN

Paul R. Ehrlich está considerado como un "neomaltusiano", un experto que avisa de que la población está creciendo exponencialmente mientras los recursos se agotan rápido. En 1968 publicó La bomba demográfica (The Population Bomb), donde advertía sobre un inminente desastre si no se conseguía  controlar la explosión demográfica. Dicen que en 1990, la bomba ya había estallado al pasar de 3.500 millones de personas a 5.500 millones (dejando en el camino a 200 millones fallecidos por hambre).

Indican que la superpoblación contribuye directamente a los problemas mundiales, como el cambio climático, haciendo calamitosas sus posibles consecuencias. Piden un programa demográfico del que resulte un número de habitantes que la Tierra pueda sostener con razonable comodidad. "Solo las perspectivas de tratar de resolver los trastornos causados por el cambio climático en un mundo habitado con 8 o 12 mil millones de personas, resultan estremecedoras", indican los autores.

 Paul R. Ehrlich y Anne H. Ehrlich  barajan varias fórmulas. Por un lado está el "incremento natural" de las poblaciones humanas (o de otros animales) cesa cuando las tasas de natalidad y mortalidad se equiparan. Entonces, a menos que se produzca una inmigración o una emigración, el índice de crecimiento demográfico (nacimientos menos defunciones) equivale a cero, registrándose un crecimiento demográfico cero (CDC). La tasa de 0,1 % generaría 6.000 millones de habitantes en doce mil años.

Entre las soluciones que proponen los autores está la ecuación del impacto del ser humano en el ambiente y que se formula como I=PRT . La I es el impacto, la P (Población), la R (Riqueza) y la T (Tecnología). Consiste en la clave para ver el papel de la población en la crisis del medio ambiente. Aunque se mejorasen las técnicas y fuesen más limpias, el aumento poblacional volvería a situar el impacto en el mismo punto pasados unos pocos años por lo que la población tiene una influencia decisiva en la ecuación.

Dice que lo principal es conseguir el control demográfico no coercitivo (que es más efectivo que la planificación familiar). Dice que una solución pasa por convencer a las naciones ricas de cambiar la mentalidad sobre el número de hijos porque gastan más recursos de la Tierra que los de los países pobres. Aconsejan a los solteros y libres que renuncien a tener hijos y a quienes tienen muchos les recuerdan su insensatez pues, según dicen, los hijos son muy caros y requieren muchos gastos hasta la universidad. La tasa de reproducción ideal sería de 1,5 hijos (por debajo de la tasa de reproducción de sustitución de 2,1; es de 2,1 porque sobreviven algunos niños más).

También está el problema del aborto en muchos países. Los autores creen que son preferibles para el control demográfico los métodos anticonceptivos (pastilla, DIU, preservativos, vasectomía), porque por sí mismos reducen los abortos, los cuales consideran que deben ser legales. Consideran que todo sería más fácil con una eficaz labor de gobierno.

Creen que detener el crecimiento en los países menos desarrollados y la impedido el éxito de los programas de planificación familiar en muchos países en vías de desarrollo, que todavía tienen una tasa elevada de mortalidad infantil y eso hace que los padres busquen familias numerosas y los hijos son una mano de obra.

Dicen que el mejor programa de control demográfico fue el de China con la política de un único hijo y el crecimiento demográfico planificado de 1974 "al aplicar medidas que habrían sido inviables en una democracia". Daban hijos para tener dos hijos espaciados pero luego descubrieron que ya eran mil millones (demasiado para un país) y rebajaron el número de hijos a uno por pareja. Ayudó el hecho de que hubiese "médicos descalzos", dedicados a la salud maternal e infantil, y que las mujeres estuviesen plenamente integradas en el trabajo. Antes de 1989, habían reducido la fertilidad a más de la mitad y las familias tenían de media 2,1 hijos. Los autores creen que el programa se puso en marcha demasiado tarde y fue coercitivo (pues la reproducción deber ser una decisión del individuo). Añaden que el hijo único fracasó en la China rural, los resultados fueron insuficientes y además, el deseo de tener un hijo varón propició el infanticidio femenino. En 1989, ya había subido la tasa a 2,4 hijos. Con esas proyecciones, se calcularon de 1.500 a 1.700 millones de habitantes.

El otro caso es el de la India, y los autores lo califican de "alarmante". En 1952, Margaret Sanger fundó la Planned Parenthood y otras mujeres de Suecia e India, defensoras de la planificación familiar, fundaron la International Planned Parenthood Federation. Recomendaron el método Ogino. En 1965, la India tenía 480 millones de habitantes y el objetivo era reducir la natalidad al 25 por mil en 1975. Pero aunque lograron bajarla a 35 por mil, resultan que también descendió la tasa de mortalidad y la población llegó a los 600 millones de habitantes. En 1989, ya eran 835 millones. El programa fue un fracaso y ningún funcionario quería someterse a la esterilización después del tercer hijo, por lo que lo intentaron con la clase media. Muchas veces, los políticos no se atrevían a seguir con el programa de planificación familiar porque era muy polémico. Por otra parte, la India, un país democrático, se volcó con desarrollar la industria y no la atención primaria ni la incorporación de la mujer al trabajo. Dudan que esta nación superpoblada pueda sobrevivir hasta 2050.

La cuestión para África es aún más alarmante, porque se reducen la mortalidad y, además, aumenta la fertilidad, lo que hace doblar la población de los países en poco tiempo.


domingo, 20 de junio de 2021

"Límites", de Giorgos Kallis (2019)

Resumen del libro "Límites", de Giorgios Kallis (2019)

Resumen original y actualizado en el siguiente link:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2021/06/limites-de-giorgios-kallis-2019.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación, licenciado en Sociología y Derecho

Sociología, ecología, crecimiento, escasez, superpoblación

............................................................................................................................

Ficha técnica

Título: "Límites"

Subtítulo: Ecología y libertad

Título en inglés: "Limits. Why Malthus Was Wrong and Why Environmentalists Should Care"

Autor: Giorgos Kallis

Edición en inglés: Stanford University Press, 2019

Edición en español: Arcadia Editorial, Barcelona, 2021

Número de páginas: 214

............................................................................................................................

Biografía oficial de Giorgos Kallis (hasta 2021)

Giorgos Kallis es profosor ICREA en el Institut de Ciéncia i Tecnología Ambientals (ICTA) de la Universitat Autònoma de Barcelona, donde investiga sobre economía ecológica. Kallis estudió Ingeniería ambiental en el Imperial College de Londres, Economía en la Universitat Pompeu Fabra y se doctoró en Políticas Ambientales en la Universidad del Egeo, en Grecia. A lo largo de los años ha trabajado en temas muy diversos: entre otros, la política del agua en Europa, el cambio climático, los límites del crecimiento o los conflictos por el uso de los recursos, pero sobre todo es conocido por sus numerosas publicaciones sobre decrecimiento.

............................................................................................................................

Texto de la contraportada

¿Qué papel ha desempeñado la idea de límites en el pensamiento moderno, desde la economía hasta el ecologismo? ¿Hablar de límites es invocar a la escasez? ¿Qué relaciones de poder hay detrás de la formulación de los límites de la naturaleza? ¿Necesita límites la sociedad? ¿De qué tipo? Estas son algunas de las preguntas que trata de responder Giorgios Kallis en este libro.

Los límites no existen autónomamente: surgen de nuestra interacción con los otros y con el entorno; son una opción individual y colectiva que forma parte de la búsqueda de la libertad. Las páginas de este libro son, sobre todo, un espacio intelectual y político para repensarlos.

De la Grecia clásica a los postulados de Malthus, de los cazadores-recolectores a los románticos, de las feministas anarquistas a los ecologistas radicales de los años 70, "Límites" traza un camino que nos permite extender que solo una cultura basada en la idea de compartir puede hacer posible el futuro planetario.

............................................................................................................................

ÍNDICE

Introducción: ¿Por qué los límites?

1. Por qué Malthus estaba equivocado
2. Economía: escasez sin límites
3. Los límites del ecologismo
4. Una cultura de límites
5. Los límites de los límites

Epílogo: En defensa de los límites

............................................................................................................................

RESUMEN

El autor Giorgos Kallis examina al inicio del libro la teoría del párroco inglés Malthus (en su panfleto publicado en 1798 contra Godwin que le hizo famoso y le permitió comprar una casa y casarse a los 38 años) de que la población estaba creciendo más deprisa (crecimiento geométrico, 1-2-4-8-16...) que la producción de los alimentos (1,2,3,4...) y que, como lo fácil es tener hijos pero lo difícil mantenerlos, "nunca habrá suficiente para que todos reciban una parte digna" y siempre hay escasez de alimentos con relación con la gente. Por ello, no se debía ayudar a los pobres ni aliviar su sufrimiento porque es así como Dios nos hace ser diligentes y trabajar (son el "excedente" y para ellos no hay reparto) porque si aumentaba la población se rompería el equilibrio y volverían a agotarse los recursos y la gente moriría de hambre o quedaría otra vez en la pobreza. Lo aconsejable era trabajar al máximo para ganarse el pan sin depender de subsidios y emigrar a los sitios donde sí hay trabajo. La Naturaleza controla nuestra superpoblación mediante la escasez de alimentos (lo que denomina un control "positivo" frente al "preventivo", en el que la razón establece el control de natalidad). Apostaba por aumentar la producción del país y el crecimiento económico para no tener miedo de la superpoblación y concluía que la desigualdad es inevitable pero no es mala. Su teoría contra las benéficas Poor Laws fue aplaudida en su tiempo porque sus seguidores sostienen que la redistribución altera el equilibrio del libre mercado. Con los siglos, se pasó a denominar la catástrofe malthusiana. El autor ve a Malthus como "un profeta del crecimiento" (en contra de lo que se pensaba, pues se le ve como un profeta de los límites).

Kallis dice que, además del principio de la población, había un segundo principio que pasó inadvertido en el ensayo de Malthus es el "principio de la escasez". Si el número de personas es siempre potencialmente mayor que la cantidad de alimentos que pueden producir, entonces hay escasez de alimentos. El mundo está limitado porque las necesidades de nuestros cuerpos son ilimitadas.

El autor dice que hoy en día los "neomalthusianos" "no entienden por qué Malthus estaba en contra del control de natalidad o por qué no apelaba a rendimientos decrecientes en agricultura tal como hacía su contemporáneo David Ricardo". Giorgos Kallis dice que Malthus insistía en que la única manera de reducir la miseria era producir más alimentos, no era un defensor de los límites, sino que "apelaba al fantasma de los límites para justificar la desigualdad y hacer una llamada al crecimiento".

El autor dice que nunca se cumplió las predicciones catastrofistas de Malthus porque lo único que dice es que la población tendría el potencial de crecer geométricamente si se deja sin control. Aunque Malthus sabía que había controles preventivos (como retrasar el matrimonio, como hizo él), lo consideraba "antinatural, inmoral y triste". No quiso ver que podíamos limitar el crecimiento de la población y ser felices.

Otra de las críticas que se hace Malthus es que no supo ver los avances tecnológicos que podían disparar la producción. Pero según el autor, Malthus fue quien imaginó un mundo limitado para poder justificar el crecimiento. No vio un límite a los recursos, sino un límite eterno para la satisfacción de nuestros deseos sin límites. O sea, dice el autor, el mundo es limitado porque los deseos de la gente son ilimitados (ahora, cualquier ciudadano medio tiene lujos impensables para la realeza de la época de Malthus). En una situación estable (estancada) no puede haber nada abundante sino sufrimiento. Nunca habrá suficiente para todos, por lógica.

Posteriormente, Kallis examina el caso de Robinson Crusoe, que llegó a una isla desierta y tuvo que sacrificar su tiempo de ocio y ponerse a trabajar. La escasez lo siguió al paraíso. Se convirtió en un "homus economicus" (figura después ensalzada por Friedman como el individuo razonable que toma decisiones acertadas).



martes, 20 de abril de 2021

"No hay apocalipsis", de Michael Shellenberger (2020)

Resumen del libro "No hay apocalipsis", de Michael Shellenberger (2020)

Resumen original y actualizado en:

https://evpitasociologia.blogspot.com/2021/04/no-hay-apocalipsis-de-michael.html

Resumen elaborado por E.V.Pita, doctor en Comunicación, licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, ecología, medioambiente, cambio climático, huella de carbono

....................................................................................................................................

Ficha técnica:

Título: "No hay apocalipsis"

Subtítulo: Por qué el alarmismo medioambiental nos perjudica a todos

Título en inglés: Apocalypse Never

Autor: Michael Shellenberger

Fecha de publicación en inglés: 2020

Editorial en español: Centro de Libros PAPF SLU, Barcelona, 2021

Número de páginas: 490 (aprox)

....................................................................................................................................

Biografía del autor

Michael Shellenberger es un activista medioambiental estadounidense. Es fundador y presidente del Environmental Progress, una organización de investigación independiente con sede en Berkeley, California, que lucha por la energía limpia y la justicia energética.

Asimismo, durante más de dos décadas, ha escrito sobre energía y medioambiente para The New York Times, The Washington Post, The Wall Street Journal y Nature Energy, entre otras publicaciones. La revista Time lo nombró "Héroe del medioambiente" en 2008.

....................................................................................................................................

Texto de la contraportada

"Michael Shellenberger lleva luchando por un planeta más verde durante décadas. Ayudó a salvar las últimas secuoyas del mundo. Participó en el precedente del actual nuevo pacto verde. Y lideró una exitosa iniciativa de científicos y activistas del clima para mantener en funcionamiento las plantas nucleares y evitar así un pico de emisiones. Pero en 2019, mientras algunos afirmaban que "miles de millones de personas van a morir", generando una enorme ansiedad entre la ciudadanía, decidió que, tras una vida como activista medioambiental, como experto en energía y padre de un adolescente, tenía que pronunciarse para separar la ciencia de la ficción.

Porque, en la mayoría de los países desarrollados, las emisiones de carbono se han ido reduciendo durante más de una década tras haber alcanzado su máximo. Las muertes debidas a condiciones climáticas extremas, incluso en las naciones pobres, han disminuido un 80 % en las últimas cuatro décadas. Y el riesgo de que la Tierra se caliente hasta temperaturas muy altas es cada vez más improbable, gracias a la ralentización del crecimiento de la población y de la abundancia del gas natural.

¿Qué hay detrás del auge del ambientalismo apocalíptico? Poderosos intereses financieros. Pero sobre todo existe un deseo de transcendencia entre personas supuestamente laicas. Este impulso espiritual puede ser natural y saludable. Pero al predicar el miedo sin amor, y la culpa sin redención, la nueva religión no está logrando satisfacer nuestras necesidades psicológicas y existenciales más profundas"

....................................................................................................................................

ÍNDICE

1. No es el fin del mundo

2. Los pulmones de la Tierra no están ardiendo

3. Basta de pajitas de plástico

4. La sexta extinción está cancelada

5. Los talleres clandestinos salvan el planeta

6. La codicia salvó a las ballenas, no Greenpace

7. Toma tu entrecot y cómelo, también

8. Salvar la naturaleza es la bomba

9. Destruir el medio ambiente para salvarlo

10. Todo sobre el verde

11. El negacionismo de la energía

12. Dioses falsos para almas perdidas

Epílogo

....................................................................................................................................

RESUMEN

El autor Michael Shellenberger, forma parte de esa corriente de autores "optimistas" como Steven Pinker (que dice que vivimos en la época menos violenta de la historia).  Shellenberger defiende una especie de "humanismo medioambiental" frente al "alarmismo ambiental" o el "ambientalismo apocalíptico" porque según dice, en su epílogo, "la gran mayoría de la gente del mundo quiere tanto prosperidad como naturaleza, no naturaleza sin prosperidad". Afirma que están "confundidos" acerca de cómo lograr ambos. Asegura que en un mundo orgánico, de bajo consumo orgánico, de bajo consumo energético y con energía renovable sería peor, y no mejor, para la mayoría de las personas y para el medio ambiente natural. Sostiene que el alarmismo ambiental debe suavizarse porque el sistema global está cambiando, con nuevos riesgos y nuevas oportunidades.

Critica estudios como el Club de Roma de 1972 que veían un mundo superpoblado y también el IPCC sobre cambio global, demasiado catastrofistas a su gusto.

El autor  Shellenberger dice que incluso ha aceptado ser revisor en informes sobre el estado de la ciencia del clima del IPCC, tras criticarlo en el 2018. Indica que el escenario del alto uso del carbón del IPCC, el RCP 8,5 era muy improbable y más probable que las temperaturas alcanzasen un pico por debajo de los tres grados centígrados por encima de los niveles preindustriales.

 Shellenberger critica que cierren centrales nucleares prematuramente que proporcionan energía confiable, de bajo coste y libre de carbono a unos 6 millones de personas en California tras la presión de NRDC, EDF, el Sierra Club y 350.org. Ahora incluso hay activistas pronucleares que desacreditan los mitos respecto a esta energía. El autor recalca que las plantas pueden funcionar durante 80 o 100 años y él mismo trabajó con humanistas ambientales para salvar las centrales nucleares y organizaron manifestaciones al estilo de Greta Thunberg.

En el primer capítulo,  Shellenberger cuenta cómo los ecologistas juveniles de Extiction Rebellition (ER), de los que formó parte Greta Thunberg, hicieron manifestaciones en Londres y se descolgaron desde edificios para protestar por la próxima catástrofe que se avecinaba en el cambio climático, porque solo quedaban una docena de años, hasta el 2030, para frenar el alza de las temperaturas hasta que fuese irreversible. Pero el autor niega que en el 2030 sea el fin del mundo, ya que en todo caso, la temperatura media global alcanzaría los 1,5 grados de exceso respecto a la época preindustrial y para ser una catástrofe tendría que estar entre 3, 4 o 6 grados de más. Además, el nivel del mar desde el siglo XIX ha subido solo 19 centímetros, lo que no parece que vaya a inundar las costas (aunque sí pone en peligro otras islas).

Del mismo modo,  Shellenberger niega que los bosques del mundo estén ardiendo. Recuerda que él fue al Congo (a la reserva de los gorilas en el monte Virunga) y que la gente quemaba madera y leña porque no tenía electricidad. Unos filántropos americanos (Bill y Melinda Gates y Buffet) crearon allí una central eléctrica de 20.000 megavatios pero eso era insuficiente para las ciudades de alrededor, por lo que cobraban 300 dólares de suministro, y ningún aldeano pobre se lo podía permitir, por lo que siguieron quemando madera. El autor dice que el carbón es mejor que la madera (más energético) y que la gasolina todavía es más energética que el resto (y fácil de usar), por lo que prevé que nadie renuncie a los combustibles fósiles por electricidad si no se le da una alternativa barata.

Respecto a las pajitas de plástico, no entiende por qué hubo ese histerismo ya que solo forman un pequeño porcentaje del plástico y además, precisamente, las pajitas se degradan con la luz solar y el agua. De ahí surgen los microplásticos, pero cree que el problema es menor si se compara con el servicio que hacen al evitar talar bosques ya que el plástico procede del petróleo y es muy barato y sirve como sustituto de elementos costosos como la madera.

Respecto a la sexta extinción, dice que quizás estén disminuyendo las poblaciones de algunas especies pero no se trata de una extinción, si no de una reducción de población. 

En cuanto a los talleres clandestinos, sostiene que estos supusieron una alternativa para aquellas jóvenes del rural que vieron una salida en la ciudad. Aunque empezaron en condiciones duras pudieron ascender y mejorar en sus empleos hasta disponer de su propia casa. Estos talleres han permitido a muchas familias del rural (en Indonesia y otros países de Asia) salir de la pobreza y acceder a las comodidades de la ciudad y labrarse un futuro. Por eso, cree que las marcas de ropa han sido "buenas" al crear prosperidad y oportunidades para los más pobres y permitirles acceder a la clase media.

Respecto a las ballenas y las tortugas de carey, dice que fueron salvadas varias veces de la extinción por los avances tecnológicos y la lógica del mercado. Primero, porque su aceite fue sustituido por el petróleo en el siglo XIX y después, en el siglo XX, por el plástico. Las mayores matanzas de ballenas fueron a finales del siglo XX por balleneros rusos y japoneses, pero incluso estos estaban sometidos a unas cuotas. Fue el mercado el que acabó con el interés económico por las ballenas.

Lo mismo pasa con la carne. Dice que si se quisiese criar a las gallinas y las vacas en libertad en vez de en granjas mecanizadas, no habría suficiente terreno y se tendrían que talar más bosques para pasto. Además, sostiene que la carne aporta energía que es imposible de conseguir solo con una dieta vegana (la cual debilita al hombre). Por ello, al tomar carne, uno se vuelve más fuerte y productivo, lo que ayuda a generar prosperidad. Ve las granjas industriales de producción de pollos como un mal menor para alimentar de forma barata a la población sin destruir más bosques.

En el mismo sentido se pronuncia sobre la energía, donde apuesta por las centrales nucleares como la mejor solución para producir energía y electricidad ya que el carbón es contaminante, lo mismo que el petróleo, y la electricidad renovable solo supone un escaso porcentaje de la producción y obligaría a ocupar mucho espacio. El gas natural es otra buena solución por su disponibilidad. Dice que sin energía o electricidad, es imposible salir de la pobreza y que usar energías renovables (como la madera, el viento o el aire) nos devolvería directamente a niveles de producción de la economía rural de la Edad Media.

Finalmente, cree que la "ciencia medioambiental" se ha convertido en otra "religión" donde el dogma es el "cambio climático" donde fieles como Greta Thunberg lo defienden a capa y espada, los sacerdotes y hechiceros son los "científicos" con los que es difícil discutir sin recibir palos, y hay tintes judeo-cristianos como que la culpa del desastre ambiental sea del hombre (y su pecado original es la huella de carbono). Tiene esos ecos bíblicos de que el hombre ha fallado y por su culpa vamos hacia la catástrofe. Se ofrecen pequeñas acciones individuales (como el veganismo, o el fin de las bolsas de plástico) para ayudar a que no llegue el fin del mundo (que sería el equivalente al catastrófico Apocalipsis bíblico).









domingo, 4 de abril de 2021

"Cómo evitar un desastre climático", de Bill Gates (2021)

 Resumen del libro "Cómo evitar un desastre climático", de Bill Gates (2021)

Ver el resumen original y actualizado en: 

https://evpitasociologia.blogspot.com/2021/04/como-evitar-un-desastre-climatico-de.html

Resumen elaborado por E. V. Pita, doctor en Comunicación, licenciado en Derecho y Sociología

Sociología, ecología, cambio climático

....................................................................................................................................

Ficha técnica:

Título: "Cómo evitar un desastre climático"

Subtítulo: Las soluciones que ya tenemos y los avances que aún necesitamos

Título en inglés: The Solutions We Have and the Breakthroughs We Need

Título en inglés: 

Autor:  Bill Gates

Publicado en inglés en el 2021

Publicado en español: Plaza & Janes, Penguin Random House Grupo Editorial, Barcelona, 2021

Páginas: 318

....................................................................................................................................

Biografía oficial de Bill Gates (hasta 2021)

Bill Gates es un experto en tecnología, líder empresarial y filántropo. En 1975, fundó Microsoft junto a su amigo de la infancia Paul Allen y, en la actualidad, copreside con su esposa la Fundación Bill & Melinda Gates. También creó Breakthrough Energy, una iniciativa para la comercialización de energías limpias y tecnologías relacionadas con el medio ambiente. Melinda y él tienen tres hijos y viven en Medina, Washington.

....................................................................................................................................

Texto de la contraportada

"Para frenar el calentamiento y prevenir los peores efectos del cambio climático, los humanos debemos dejar de emitir gases de efecto invernadero a la atmósfera.

Si esto parece complicado es porque lo será. El mundo jamás ha acometido una tarea tan colosal. Todos los países tendrán que modificar su manera de hacer las cosas, porque prácticamente la totalidad de las actividades de la existencia contemporánea conllevan la liberación de este tipo de gases.

Si el mundo sigue produciendo gases de efecto invernadero, el cambio climático continuará empeorando y su impacto sobre la humanidad será con toda seguridad catastrófico.

No obstante, esto puede cambiar. Ya disponemos de algunas de las herramientas que necesitaremos y, en cuanto a las que aún no tenemos, todo lo que he aprendido acerca del clima y de la tecnología me lleva a ser optimista sobre cómo solventarlas, implementarlas y, si se realiza con rapidez, evitar un desastre climático.

Este libro trata sobre nuestro futuro y las razones por las que creemos que debemos cambiarlo."

....................................................................................................................................

Texto de la solapa

En este libro tan necesario y riguroso,  Bill Gates expone un plan amplio, funcional y, sobre todo asequible, para reducir a cero las emisiones de los gases de efecto invernadero a tiempo y evitar una catástrofe medioambiental.

Bill Gates ha dedicado una década a investigar el cambio climático. Con la orientación de expertos, se ha centrado en determinar qué medidas debemos tomar para detener la carrera del planeta hacia un desastre medioambiental irreversible. En este libro, el autor no solo reúne la información básica para que nos concienciemos de la necesidad de eliminar las emisiones de los gases causantes del efecto invernadero, sino que también explica qué debemos hacer para alcanzar ese objetivo tan importante.

Gates nos ofrece una descripción lúcida de los desafíos a los que nos enfrentamos. Aprovechando sus conocimientos en innovación y en la introducción de nuevos conceptos en el mercado, nos detalla cuáles son los campos en los que la tecnología ya está ayudando a reducir las emisiones, cómo y cuándo se logrará que la tecnología actual sea más eficaz, dónde necesitamos dichos avances y quiénes están trabajando en estas mejoras tan necesarias. Por último, traza un plan práctico y específico para llegar a las cero emisiones, implicando a gobiernos, a empresas y a nosotros mismos en esta crucial misión.

Como advierte Bill Gates, cumplir el objetivo de las cero emisiones no será una tarea sencilla, pero está a nuestro alcance si seguimos sus pautas.

....................................................................................................................................

ÍNDICE

Introducción. De 51.000 millones a cero

1. ¿Por qué cero?
2. No será fácil
3. Cinco preguntas que plantear en toda conversación sobre el clima
4. Cómo nos conectamos
5. Cómo fabricamos cosas
6. Cómo cultivamos y criamos
7. Cómo nos desplazamos
8. Cómo calentamos y enfriamos
9. Adaptarnos a un mundo más caluroso
10. Por qué son importantes las políticas gubernamentales
11. Un plan para llegar a cero
12. Lo que cada uno de nosotros puede hacer

Epílogo. El cambio climático y la covid-19

....................................................................................................................................

RESUMEN

Bill Gates pide que memoricemos esta cifra: 50.000 millones de toneladas de CO2 (responsable del efecto invernadero que causa un calentamiento global) que se vierten cada año a la atmósfera. Su reto es dejar esta cifra a cero porque, si permitiésemos seguir emitiendo un pequeño porcentaje, pasaría como la bañera a la que cerramos el grifo pero dejamos corriendo un hilillo de agua hasta que el agua la desborda. Lo mismo pasa con el cambio climático, dice Gates. Las temperaturas han subido más de un grado desde que comenzó la revolución industrial y podría llegar a 2 grados a finales de siglo, suponiendo que no crezca aún más. Seguir contaminando, aunque sea poco, podría desbordar la bañera y hacer cambios irreversibles en el planeta.  Otro dato importante es que el mundo consume 5.000 gigavatios (una ciudad mediana, un gigavatio y un hogar, 1 kilovatio)

El libro es un ejercicio realista de a dónde se puede llegar para evitar el cambio climático. Gates intenta aclarar algunas estadísticas confusas y analiza los campos en los que la tecnología actual puede resultar útil y los que requieren avances importantes. Algunas soluciones deben implementarse a gran escala y ya existen pero hay que desarrollar muchas otras innovaciones y difundirlas por el mundo en pocas décadas. Al final del libro propone un plan y las políticas que pueden adoptar los gobiernos, y una serie de pasos que todos podemos seguir para ayudar al mundo al alcanzar la meta del cero.

El autor dice qué podemos hacer respecto a los cambios que ya se está produciendo en el clima y cómo podemos ayudar a los más desfavorecidos, los que tienen más que perder pese a que son los que menos han contribuido al problema. Una de las soluciones que propone es la geoingeniería para enfriar el planeta de forma artificial en décadas sin arruinar la economía. Considera que cuando nos centramos en los tres factores a un tiempo (tecnología, políticas y mercados) se puede promover la innovación, la creación de nuevas empresas y la comercialización rápida de nuevos productos. 

Otras soluciones en su plan que propone es fijar el precio del carbono, crear estándares de electricidad limpia, crear incentivos para reducir costes y riesgos, construir la infraestructura que incorpore las nuevas tecnologías al mercado, cambiar las reglas para que las nuevas tecnologías puedan competir, aprovechar el poder de la contratación pública, quintuplicar la energía limpia y la I+D relacionada con el clima durante la próxima década, apostar más por proyectos de I+D de alto riesgo y alta rentabilidad, adaptar la I+D a nuestros mayores necesidades y colaborar con la industria desde el principio.

El plan pasa por que la electricidad, más limpia, sustituya al carbón y a otros combustibles fósiles pero para generar electricidad se están usando las contaminantes centrales térmicas principalmente y, por el momento, las energías alternativas como la solar o la eólica son minoritarias mientras que las centrales nucleares, que son limpias pero peligrosas, están muy desprestigiadas por los accidentes de Chernobil, entre otros. Propone encontrar una energía verde y barata.

También cree que las leyes sobre el aire limpio de los años 70, que lograron que desapareciesen las nubes de "smog" de Los Ángeles, se han quedado obsoletas porque no incluyeron el calentamiento global, algo que se fue descubriendo en las últimas décadas a partir de los años 60.

Uno de sus conceptos es la "prima verde", lo que equivale a gravar el precio de un producto o material para compensar su coste real ecológico (el coste de eliminar o aspirar el CO2 que emite). Es decir, se cobraría la externalidad (contaminación) que generan los combustibles fósiles. Por un ejemplo, supongamos que un bidón de petróleo cuesta 80 dólares; el precio real subiría a 100 si le añadimos el coste de aspirar el COque desprende, esa sería la prima, lo mismo que el cemento o el plástico.

Una de sus propuestas es "secuestrar" el dióxido de carbono que hay en el aire porque, a día de hoy, ve difícil parar todas las centrales térmicas del mundo, algunas recién construidas, ya que muchos países subdesarrollados apenas cuentan con otra tecnología barata para abastecer de electricidad a sus respectivas poblaciones. Y la electricidad es el primer paso para tener un mundo purificado. Va a ser difícil encontrar rápidamente una fuente de energía verde y barata y ponerle en marcha llevaría décadas, demasiado tarde. Por ello, indica, una solución factible pasa por instalar 50.000 máquinas por todo el mundo que limpien el aire, como ya está probando Suiza. El CO2 lo entierran o lo convierten en un líquido, de forma que purifican el aire de la atmósfera al retirar el contaminante. Esto solo se puede hacer para el CO2 pero no para el metano (mucho más potente como gas de efecto invernadero). 

Respecto a la electricidad, el autor propone ideas como hacer algoritmos para redistribuir la energía generada por el sol o el viento en estados donde funciona a tope para redistribuirlos en otros donde esta energía es intermitente (pero sería un lío jurídico por las expropiaciones para tender las líneas).

El autor dice que el cemento supone un importante porcentaje de emisión de CO2 (una tonelada de cemento exhalan una tonelada de CO) y que no es posible eliminarlo. Habría que pensar en otros materiales, pero de momento, no hay alternativa. Admite que ningún país va a dejar de construir edificios con cemento y hormigón (siendo China la que más consume), por lo que hay que pensar materiales ecológicos alternativos.

También desvela que el consumo de carne y su producción (incluida la agricultura) genera el 19 % del CO2 que emitimos.

Estas son algunas de las conclusiones del libro:

Señala que hay una tarea titánica por delante y hacerla con mucha rapidez, por lo que harán multitud de avances en ciencia y en ingeniería. Además de convencer a los políticos, necesita que el sistema energético prescinda de todo aquello que no queremos y conserve lo que nos interese, que cambie todo para que todo siga igual.

Hay que convertir las toneladas de emisiones en un porcentaje de 51.000 millones.

Encontrar soluciones para las cinco actividades que son la causa de esas emisiones: fabricar cosas, consumir energía, cultivar y criar, desplazarse y calentar o enfriar.

Kilovatio=hogar, gigavatio=ciudad medidana, cientos de gigavatios=país rico y grande.

Considerar cuánto espacio será necesario.

Tener presentes las primas verdes y averiguar si son asequibles para los países de renta media.

Gates insiste en que necesitamos un plan concreto para desarrollar nuevas redes energéticas que nos proporcionen una electricidad barata, fiable y neutra en carbono siempre que la necesitemos. Recalca que la producción de electricidad desempeñará un papel fundamental en la descarbonización de otros sectores de la economía (fabricación de acero y cemento).

Los pasos para llegar a las cero emisiones en la industria serían: Electrificar todos los procesos posibles, obtener esa electricidad de una red descarbonizada, absorber las emisiones restantes mediante la captura de carbono y hacer un uso más eficiente de los materiales.

Gates advierte de que pronto tendremos que producir un 70 % más de alimentos y a la vez reducir las emisiones con vistas a eliminarlas por completo. Para ello harán falta muchas nuevas ideas sobre maneras de fertilizar plantar, criar ganado y desperdiciar menos comida, y los habitantes de los países ricos tendrán que comer menos carne.

Respecto al transporte, propone lograr que haya el máximo número de coches que funcionen con electricidad y el resto con combustibles alternativos.

El autor resalta que el problema es de una complejidad extrema pues afecta a casi todas las actividades humanas, pero disponemos de herramientas que deberíamos utilizar para disminuir las emisiones, pero faltan herramientas y hay que rebajar las primas verdes en todos los sectores (eso exige que falta mucho por inventar).

Al consumidor le recomienda contratar las tarifas verdes de la compañía de servicios, reducir las emisiones domésticas, comprar un vehículo eléctrico, probar las hamburguesas de origen vegetal, establecer un impuesto interno sobre el carbono, priorizar la innovación en soluciones bajas en carbono, practicar la adopción temprana, involucrarse en el proceso de elaboración de políticos, conectar con la investigación financiada por el gobierno y ayudar a los innovadores a atravesar el valle de la muerte.

Finaliza el libro con optimismo y luego un anexo sobre el covid. Dice que tras el nefasto 2020, la idea es centrarnos en las tecnologías, las políticas y las estructuras de mercado que nos encaminen hacia la eliminación de los gases de efecto invernadero antes de 2050.